En mitad del calor veraniego y como anticipo para el Salón de Frankfurt, donde se presentará de forma oficial, hace su aparición el BMW i8, el deportivo 2+2 híbrido enchufable con el que la firma bávara completa la reciente presentación del eléctrico BMW i3. Ambos constituyen, según la marca, una "respuesta revolucionaria al reto que deberá enfrentar la movilidad individual en el futuro".
En el caso del BMW i8, los de Múnich combinan un motor tricilíndrico de gasolina de 1.499 cc que desarrolla 231 CV con un motor eléctrico síncrono cuya potencia es de 96 kW (131 CV). Como potencia combinada, el sistema híbrido BMW eDrive entrega 362 CV con 570 Nm de par.
Aspecto exterior y estructura
Su aspecto exterior es especialmente llamativo, más si observamos las dimensiones del BMW i8: 4.689 mm de longitud con 2.800 mm de batalla, 1.942 mm de anchura y sólo 1.293 mm de altura dan como resultado un deportivo de baja altura que recoge los rasgos esenciales de los últimos diseños BMW para llevarlos a un plano más deportivo que futurista.
En su línea destaca el capó alargado que emerge de un frontal extremadamente bajo para proyectarse hacia un techo largo y descendente hasta la zaga. En los laterales llaman la atención las puertas LSD, que acrecentan la deportividad del diseño, y las llantas de 20 pulgadas realizadas en aluminio forjado. Por su parte, los voladizos son mínimos en un cuerpo de gran distancia entre ejes como este. Y, plasmado el trabajo de aerodinámica en números, resulta un Cd de 0,26.
La estructura del BMW i8, fiel a la arquitectura LifeDrive ya presente en el i3, se basa en un bastidor de aluminio que contiene el grupo propulsor más un habitáculo construido en plástico reforzado con fibra de carbono (PRFC). Esto confiere al i8 un centro de gravedad extremadamente bajo y una masa en orden de marcha inferior a 1.490 kg, con un reparto de pesos muy próximo al 50:50.
El uso del PRFC permite una reducción de masa del 50 % si lo comparamos con el acero, y del 30 % si hablamos de aluminio. Esto lleva, por ejemplo, a poder tener puertas de apertura vertical sin complicaciones. Además, según los ingenieros de la marca el PRFC ofrece la misma solidez, como mínimo, que el acero o el aluminio. De esta manera es posible compensar el peso adicional que dan al vehículo el motor eléctrico y las baterías.
Motorización y prestaciones del BMW i8
El BMW i8 cuenta con una motorización híbrida basada en un propulsor de gasolina tricilíndrico con tecnología BMW TwinPower Turbo, un motor eléctrico síncrono y un acumulador de iones de litio además del módulo de recuperación de la energía propio de los híbridos.
El motor de combustión es de inyección directa con distribución Valvetronic, de 1.499 cc con una entrega de potencia máxima de 231 CV y una fuerza de 320 Nm. O, dicho de otra manera, cuenta con una potencia específica de 154 CV por litro, lo que sitúa al pequeño molinillo bávaro en la línea de los motores de altas prestaciones.
Es un propulsor de nuevo cuño, el primer tricilíndrico en ser montado en un BMW de producción, y sus vibraciones han sido reducidas con un árbol de compensación. El motor se aloja próximo al tren trasero, sobre el que actúa a través de una caja automática de seis relaciones.
Por su parte, el motor eléctrico ataca al eje delantero con una potencia de 96 kW (equivalentes a 131 CV) con un par motriz de 250 Nm lineal hasta altos regímenes y una caja reductora de dos niveles. La batería va montada en la zona central del coche, ligeramente desplazada hacia la parte anterior, lo que ayuda a mejorar la estabilidad del conjunto.
En combinación, el BMW i8 desarrolla 362 CV y lo hace con una fuerza de 570 Nm. Esto redunda en una aceleración de 0 a 100 km/h en menos de 4,5 segundos, que es el mismo lapso que se emplea en recuperar de 80 a 120 km/h. Alcanza 250 km/h, cifra su consumo mixto NEDC en 2,5 l/100 km (con un nivel de emisiones de CO₂ inferior a 59 g/km) y cuenta con una autonomía de 500 km.
En modo sólo eléctrico, el BMW i8 puede circular a 120 km/h y tiene una autonomía máxima de unos 35 kilómetros. El tiempo de carga de las baterías es de tres horas en toma doméstica (230 V, 10 A) o de dos horas con un cuadro de recarga mural BMW iWallbox (230 V, 16 A).
Equipamiento y modos de funcionamiento
En la documentación sobre el equipamiento no encontramos de momento datos sobre acabados o texturas, sino elementos que nos llevan a considerar el BMW i8 como un ejercicio de buscar la reducción de masa y la eficiencia en el comportamiento dinámico del vehículo.
Así, podemos hablar de detalles como el uso del magnesio para el soporte del salpicadero, para reducir la masa en un 30 % si la comparamos con la del BMW Serie 6, o reparar en elementos como los aislantes de la climatización, o incluso la tornillería ahora más ligera, con resultados acumulativos en el adelgazamiento del híbrido.
También llama la atención el uso de vidrio templado químicamente, similar al que se utiliza en pantallas táctiles de teléfonos móviles, para separar el habitáculo del maletero. La superposición de dos capas de 0,7 mm de grosor con una lámina de aislamiento acústico entre ambas permite un gran aislamiento con una reducción de masa del 50 % en comparación con una luna de vidrio laminado reforzado convencional.
Por su parte, la dinámica del vehículo se refuerza con la gestión del motor para mejorar la seguridad activa. Por ejemplo, el control de distribución permite aplicar la carga donde más convenga al trazar las curvas. Al entrar en curva, se aplica mayor fuerza en el tren trasero para aumentar la precisión de giro. Al salir de la curva, el sistema recupera la repartición estándar del momento de impulsión.
Para seleccionar el modo de funcionamiento, el conductor dispone, en la consola central del selector Driving Experience Control, que está presente ya en otros modelos de BMW con sus tres modos de funcionamiento, y la tecla eDrive, que lógicamente es exclusiva del BMW i8 y permite la conducción en modo 100 % eléctrico.
En función de las necesidades de marcha, se puede elegir entre Sport para contar con una mayor aceleración y con un cambio de marchas manual, Eco Pro, que consigue la mayor eficiencia posible actuando si es preciso sobre la climatización o los asientos y retrovisores calefactados, o bien Confort, que es un modo equilibrado.
Precio para España y lanzamiento del BMW i8
Por el momento la marca no ha facilitado el precio del BMW i8. Se rumorea que superará los 100.000 euros, pero aún no tenemos el dato oficial. El BMW i8 se presentará en septiembre durante el Salón de Frankfurt, de manera que en cuanto dispongamos de más información modificaremos este apartado.