¿Recuerdas las versiones más especiales de la historia del BMW M3? Aquí tienes un repaso fotográfico

Todas las generaciones del mítico BMW M3 (cuya última encarnación acabamos de probar) han contado con versiones especiales, más potentes y de corte aún más deportivo, algunas de ellas en edición limitada, por lo que están muy cotizadas. Hoy vamos a hacer un repaso fotográfico a estas versiones deportivas que han ido surgiendo a lo largo de la historia del BMW M3.

La última de estas ediciones ya no se denomina BMW M3, sino BMW M4 Coupé, y se trata de la variante GTS, las más bestia de la gama, de la que se fabricarán únicamente 700 exclusivas unidades. Su motor 3.0 litros biturbo de seis cilindros desarrolla 500 CV y 600 Nm, permitiendo un 0 a 100 km/h en 3,8 segundos y una velocidad punta de 305 km/h. Así pues, es el más rápido de todos.

De cualquier manera, el BMW M4 GTS lo tenemos muy reciente, así que dejémoslo a un lado para dar paso a sus antepasados, con apellidos tan legendarios como Sport Evolution, CSL, GTS o GT. ¿Ya os van sonando más? Pues vamos a repasar cada uno de ellos, en una serie de bonitas fotografías, aunque seguro que siguen marcados a fuego en vuestras retinas. En realidad ya hicimos un repaso sobre ellos con el lanzamiento del M4 GTS, hace unos meses, pero ya que hay fotos nuevas y no tienen desperdicio...

BMW M3 Sport Evolution

El BMW M3 original (E30) nació en 1985, pero no fue hasta 1990 cuando se introdujo al mercado el M3 Sport Evolution, un paso más allá que el M3 Evolution, creado para homologar evoluciones en el M3 de competición y también firmado por BMW Motorsport GmbH. Se construyeron únicamente 600 unidades (en rojo o negro solamente), todas ellas con paragolpes específico y alerón trasero regulable. Más potencia -238 CV- y menos peso (-35 kg), la receta perfecta.

BMW M3 GT

La siguiente generación del BMW M3, denominada E36, tuvo también una variante muy especial, de apellido GT, que aterrizó en el mercado en 1995. Estuvo limitada a únicamente 350 unidades, 50 de ellas con volante a la derecha, y montaba un 3.0 litros de seis cilindros en línea de 295 CV de potencia. El resultado, gracias también a la dieta a la que se sometió el coche mediante elementos de aluminio, era un 0 a 100 km/h en 5,2 segundos.

BMW M3 CSL

Probablemente el más mítico de todos. El M3 CSL (de Coupé Sports Lighweight) nacía en 2003 y mejoraba aún más la receta del original E30 SE: un ahorro de peso de 180 kilogramos (gracias al uso de fibra de carbono, por ejemplo) y un incremento de potencia del motor 3.2 litros de seis cilindros hasta los 360 CV. ¿El resultado? Un esprint de 0 a 100 km/h en 4,6 segundos.

BMW M3 GTS

Quizá no sea el más mítico, pero si es el más especial, al menos por número de unidades fabricadas: sólo 138 vehículos. Además, dejó a un lado la tradición de los seis cilindros a favor de un motor 4.4 litros V8 de giro rápido que llegaba a los 450 CV y subía por encima de las 8.000 RPM. Esto supuso un aumento de potencia de 30 CV con respecto al M3 convencional de dicha generación y también perdió 125 kilogramos de peso, así como los asientos traseros, sustituidos por una jaula antivuelco.