"Sabes que hay sobrepoblación en el mundo, ¿verdad? Los coches de gasolina producen contaminación y frenan la población. Esa es la idea". Así intenta 'vender' un Arnold Schwarzenegger de incógnito vehículos con motores de combustión en una campaña promocional dirigida a impulsar la venta de coches eléctricos en Estados Unidos.
El vídeo no tiene desperdicio.
De Terminator a 'activista' medioambiental
Con perlas como "el coche es tan silencioso que oyes literalmente todo lo que tu familia dice", Howard Kleiner es el vendedor de un concesionario de California que trata de convencer a los potenciales clientes de las virtudes de los vehículos de gasolina, y echar por tierra las cualidades de los eléctricos, como el silencio.
Pero parece que no lo consigue.
Schwarzenegger tiene bastante experiencia en el terreno político. En 2006 sacó adelante un ambicioso plan de reducción de gases de efecto invernadero en California, donde ha sido gobernador durante ocho años, y que constituyó la primera medida coercitiva de reducción de emisiones en Estados Unidos.
Lo cierto es que el vídeo, producido por la organización Veloz, toca sin quererlo un tema sensible: la barrera que pueden suponer los concesionarios a la hora de comprar coches eléctricos.
Un estudio publicado en 2018 y basado en 126 experiencias de compra en 82 concesionarios de Dinamarca, Finlandia, Islandia, Noruega y Suecia encontró que los vendedores despreciaron los coches eléctricos, orientando el proceso de venta hacia la compra de vehículos de combustión interna.
Dos de las principales barreras que se encontraron los investigadores fue la orientación tecnológica de los vendedores, su disposición a vender y el limitado conocimiento mostrado de los coches eléctricos.