Esta primavera, el especialista alemán Mansory nos 'deleitó' con su visión propia del Bugatti Chiron. Hasta la fecha, había mostrado cuatro preparaciones concebidas sobre el Veyron, pero aún no se había puesto manos a la obra con su sucesor. Cuando se desvelaron todos sus detalles el preparador no hizo público el precio, pero ya lo conocemos. Y ojo porque es casi el doble de caro que el modelo de serie...
Sí, has leído bien. El bautizado como Mansory Centuria tiene un coste de nada menos que 4,25 millones de euros. Una desorbitada cifra que consigue lo que parecía increíble: dejar atrás los 2,4 millones de euros que cuesta el Bugatti Chiron.
De esta manera, la preparación de Mansory sobre el hiperdeportivo galo se convierte en una de las más caras de la actualidad y posiblemente de la historia.
Y todo ello teniendo en cuenta que es esencialmente maquillaje, pues el propulsor W16 de 8.0 litros del Chiron permanece inalterado, así como chasis, suspensión, frenos, sistema de escape, etc. Bien es cierto que el Chiron no es que necesite precisamente mejoras en el apartado técnico: 1.500 CV, 1.600 Nm de par máximo, 420 km/h de punta, aceleración de 0 a 100 km/h en 2,5 segundos... sus cifras hablan por sí mismas.
El traje en fibra de carbono más caro del mundo
Así, los más de cuatro millones de euros que cuesta este Mansory Centuria, quedan 'justificados' únicamente por el kit de carrocería que ha añadido el especialista germano. Y que, como suele acostumbrar el preparador, no es precisamente discreto.
No pocos paneles de la carrocería del Bugatti Chiron han sido sustituidos por otros nuevos en fibra de carbono de concepción propia (Forged Carbon la llama Mansory). De esta manera, el Centuria dispone de pasos de rueda ensanchados y la zaga está dominada por un descomunal difusor plagado de listones verticales.
Por supuesto, las defensas frontales también son ahora más agresivas, el capó cuenta con líneas más marcadas, con la zona central va en fibra de carbono vista, y por doquier se reparten branquias y aperturas que no encontrábamos en el modelo de producción.
Por último, en el interior nos encontramos con una estupenda sobredosis de Alcantara en dos tonos de azul: el aterciopelado tejido viste no sólo asientos, sino también volante, salpicadero, túnel central, techo, suelo... en definitiva, prácticamente todo el habitáculo.
Sea como fuere, Mansory ha estimado que sus modificaciones sobre el Chiron cuestan más de 1,8 millones de euros. Echando un ojo a su catálogo, el desorbitado precio es cuanto menos llamativo: de las cinco preparaciones que ofrece actualmente, la segunda más cara cuesta 449.820 y corresponde a un Bentley Continental GT que mostró este año en el Salón de Ginebra.
