Si las condiciones para poder optar a comprar un Ford GT te parecían exageradas -lo del dinero, ahí es lo de menos- espera a conocer las condiciones que debe cumplir un concesionario Ford si pretende efectuar el mantenimiento del nuevo superdeportivo de Ford.
En un documento interno obtenido por All Ford Mustangs se detallan todos esos requisitos, en los que se incluye una zona separada y exclusivamente reservada para trabajar en el Ford GT. Cambiarle el aceite al lado de un Focus, por ejemplo, estará prohibido.
Los mecánicos que podrán acercarse al Ford GT recibirán una formación específica de Multimatic (la empresa canadiense que fabricará el Ford GT). Pero éstos solo podrán efectuar algunas operaciones de mantenimiento.
Los trabajos más básicos y reparaciones sencillas se podrán efectuar en el concesionario, pero cualquiera operación que se salga de lo habitual requerirá la ayuda de un técnico de Multimatic, ya sea por teléfono, o bien in situ (el mecánico de Multimatic viajará hasta el taller, da igual en qué lugar del mundo esté). Obviamente, los trabajos más complejos o reparaciones tras un accidente importante se efectuarán en la fábrica.
Y no es solamente la necesidad de una nueva formación o de una área dedicada al coche, también tendrá que cumplir con una serie de normas y compra de material que se sale de lo común para un concesionario Ford.
Por ejemplo, se les exige una grúa adaptada al transporte (carga y descarga) del Ford GT. Esto es bastante habitual a este nivel de gama, suelen ser remolques cerrados y adaptados para coches muy bajos, tipo competición. La idea es que se recoja el coche en casa del cliente y se le devuelva con esa grúa.
También necesitarán un juego de gatos y soportes con ruedas para mover el coche y ponerlo en el elevador. Y es que sólo el mecánico y el especialista certificados por Multimatic podrán tocar el Ford GT.
Y nada de dejar el coche en un rincón del taller mientras no se trabaja en él: deberá ir cubierto con una funda dedicada y nunca podrá estar aparcado al aire libre, aunque sea dentro del recinto del concesionario.
Todos estos requisitos son en realidad bastante comunes cuando se trata de un superdeportivo, especialmente a este nivel de precio (400.000 dólares), pero no son nada habituales en un concesionario Ford
Al parecer, en Estados Unidos, supondría una inversión de entre 30.000 y 50.000 dólares para el concesionario. Habida cuenta de los precios practicados por las marcas en Europa para con sus concesionarios, esto parece una ganga. Sin embargo, debemos recordar que se trata de una inversión destinada al mantenimiento puntual de un solo modelo. Eso sí, el plus en imagen de marca que le puede dar al taller justifica para muchos la inversión.
En Motorpasión | Así se hizo el Ford GT 2016: esta espectacular colección de fotos de su desarrollo te lo muestra
