Cuando el asunto de las emisiones justamente ha concluido su segundo acto, y aunque estemos lejos de su resolución en Estados Unidos, país en el que se abrió esta caja de Pandora, desde el país americano nos llega una noticia que puede acabar de dar la puntilla al fabricante de Wolfsburgo. Volkswagen está bajo una nueva lupa, esta vez por la cifra de víctimas declarada.
En Estados Unidos, los fabricantes deben declarar a la NHTSA cada reclamación por víctimas, ya sean mortales o heridos viales. Estos datos nutren el sistema de alerta temprana de la NHTSA, cuya misión es detectar posibles agujeros de seguridad en los coches. Bien, pues el Grupo Volkswagen ha proporcionado una tasa de reclamaciones por victimas realmente baja: nueve veces menor que la reconocida por la media de los once mayores fabricantes que operan en el país, y que aglutinan un 88 % de las ventas en Estados Unidos.
Neil Steinkamp, director gerente de la asesoría financiera Stout Risius Ross (SRR), explica a Bloomberg que "los datos demuestran que incluso ante la base de una flota ajustada, el número de incidentes reconocido por Volkswagen es significativamente inferior a lo que cabría esperar en función de lo declarado por otros fabricantes de automóviles", y que "también está muy por debajo de la denuncia de los fabricantes de automóviles que ya han sido citados por encubrimiento".
¿A qué otros fabricantes se refiere Steinkamp? A Honda y FCA, que recientemente han sido acusados de proporcionar datos erróneos a la agencia de seguridad vial norteamericana. En el caso de Honda, la sanción llegó en enero de este año y fue ejemplarizante: 70 millones de dólares (unos 61,5 millones de euros). Por su parte, el caso de FCA se destapó a finales de septiembre, a través de los datos de la marca Chrysler, y aún está pendiente de resolución. Según Steinkamp, la cifra de víctimas de Volkswagen es inferior a la mitad que las presentadas en su momento por Honda y por FCA. Volkswagen no ha respondido, por el momento, a las insinuaciones de SRR.
En el exhaustivo análisis realizado por SRR durante la última década, se tomaron las cifras declaradas por cada fabricante y se ponderaron con las cifras de ventas en Estados Unidos. Del informe de SRR destacan, por la máxima, General Motors, con 524 incidentes por cada millón de vehículos, seguido de Toyota y BMW; y por la mínima, las cifras que se consideran manipuladas por FCA (101) y Honda (78), además de las cifras aportadas por Nissan (78).
Ahora, los datos de Volkswagen rebajan este mínimo hasta niveles que en América resultan sospechosos: 34 incidentes denunciados por cada millón de vehículos, en un escenario en el que el promedio se sitúa en 301 siniestros con víctimas por cada millón de vehículos vendidos en Estados Unidos.
¿Se suma una nueva papeleta para el fabricante alemán en tierras americanas? ¿Por qué, si Honda y FCA fueron descubiertas meses atrás proporcionando datos incorrectos, llega en octubre la noticia de Volkswagen, sumándose de esta manera al caso de las emisiones de NOx? ¿Por qué se toman como sospechosos los datos de Volkswagen y no los de Nissan o Mazda, que al fin y al cabo son tan reducidos como los de los denunciados Honda o FCA, respectivamente? ¿Hay más fabricantes que estén aportando datos incorrectos sobre víctimas a la NHTSA? Y, finalmente, ¿es el dato de las denuncias por siniestros con víctimas, aportado por los mismos fabricantes, una cifra realmente transparente que permita mejorar la seguridad vehicular? Lejos de aportar luz a lo sucedido durante los últimos años, el análisis de SRR plantea una buena colección de dudas que no son fáciles de resolver. Veremos qué consecuencias acarrea para cada uno de los implicados.