A la hora de crear un nuevo vehículo, los diseñadores han de lidiar con toda clase de obligaciones legales (altura de los faros con respecto al suelo, tipo de luces, etcétera) e imposiciones de los ingenieros (voladizo más o menos grande, ancho de vías, etcétera).
Sin embargo, en la fase creativa hay dos elementos que dibujan invariablemente de forma artística: las ruedas (siempre como si fuesen de 47 pulgadas) y unos retrovisores diminutos o inexistentes. Aunque las ruedas son cada vez más grandes en los modelos de serie, aún no se llega a esos extremos. En cambio, ya pueden prescindir de los retrovisores. Al menos, en Japón, donde ya es legal que cámaras cumplan con las funciones del retrovisor
Una idea que viene de lejos
Querer sustituir los retrovisores por cámaras no es nada nuevo. A principios de los años 80, concept cars como el Sbarro Challenge ya lo proponían, aunque luego debían usar retrovisores para poder ser matriculados. En el interior, una pequeña pantalla de tubo proyectaba en blanco y negro lo que había detrás del coche.
Y los diseñadores nunca han abandonado esa idea. De hecho, a los ingenieros también les gustaría poder prescindir de los retrovisores, pues haría el trabajo del departamento NVH (noise, vibration & harshness) al ser un objeto que genera turbulencias, ruidos aerodinámicos, etc.
Sin embargo, en contra de los deseos de los diseñadores e ingenieros, los retrovisores se hicieron cada vez más grandes por cuestiones de seguridad: se mejora la visibilidad y se puede incluir el aviso luminoso de vehículo en ángulo muerto en el mismo retrovisor.
Pronto veremos por la calle coches sin retrovisores
El mes pasado, Japón se convirtió en el primer país en autorizar coches sin retrovisores, de manera que utilizarán cámaras para realizar esa función. Además de generar un nuevo mercado para los fabricantes de electrónica —en unos años, es probable que los vídeo-retrovisores sean la norma para los coches nuevos—, también pueden aportar un plus en seguridad.
Las cámaras utilizadas pueden proyectar una imagen más clara de noche, en caso de lluvia, ofrecen un ángulo de visión más amplio que incluye el ángulo muerto de un espejo retrovisor tradicional y pueden atenuar digitalmente el brillo del sol durante el día.
Próximamente saldrá a la venta un modelo de gama media en Japón que equipará los vídeo-retrovisores Smart Rear View Monitor de la firma Ichikoh. Será el primer coche de serie en equipar este sistema. Y esto no ha hecho más que empezar.