Nunca es tarde, si la dicha es buena (o eso dicen). En 1974 Jack Klunder tenía 18 años y estaba jugando un partido de baloncesto con sus amigos, y tras el mismo se percató que su coche había sido robado (junto a otros 59 coches). Era un 1966 Ford Mustang GT Coupe, comprado con el esfuerzo de su padre, reparado y puesto a punto. No volvió a verlo, y no estaba asegurado, así que no hubo indemnización.
La policía prometió avisarle si aparecía. Pasaron 35 años y el señor Klunder, editor de Daily News Los Angeles, recibió una llamada de la policía a través de su mujer. Le comunicaron que el Mustang había aparecido , pero ella indicó que lo había usado para irse a trabajar hace horas.
Hay que ponerse en contexto. Jack volvió a comprarse un Mustang hace pocos años, cuando recuperaron el look de los 60, y lo usa habitualmente. También compró uno a cada una de sus hijas. Luego cayó en la cuenta de que el Mustang que había aparecido era el “viejo”, el que compró su padre, su primer coche.
El rastro del coche se pierde en 1974. Se sabe que en 2001 una mujer lo compró de ocasión y lo estuvo utilizando, ajena a su oscuro pasado. En 2009 ese coche se pone a la venta, y al comprobarse el historial de la matrícula/VIN, trascendió la auténtica propiedad del coche.
Jack, en homenaje a su padre fallecido en 2005, decidió quedárselo y restaurarlo por completo. Los chicos de Auto B-Craft, empresa de uno de sus amigos, lo pusieron a punto tal y como estaba en sus años mozos, ha sido un trabajo de seis meses que han merecido la pena.
Mejor tarde que nunca, ahora Dennis tiene una segunda juventud para disfrutar de él.
NOTA: Por temas de copyright solo puedo enlazaros a la galería de Daily News LA para que veáis cómo ha quedado el coche, en el post nos tenemos que conformar con imágenes históricas de Ford (el robado es un GT, estos no).
Vía | Diariomotor
Fuente | Daily News LA