Señores, la revolución tecnológica ha llegado al mundo de las grúas. Quien tenga la maldita manía de dejar el coche en doble fila, en el vado del vecino o sobre una zona reservada para personas con movilidad reducida porque, total, "es un momentito de nada", tiene un nuevo motivo de preocupación con el que vérselas por la noche, entre ovejita y ovejita sedante.
Hasta la fecha, observar la actividad de la grúa municipal era un deporte bastante anodino, la verdad. Ah, pero este vídeo, grabado en algún aeropuerto de Turquía, nos muestra una innovación que, si triunfa, puede suponer un nuevo espectáculo para paseantes aburridos: ver cómo se captura un coche con estilo.
Algo tiene el sistema este, que me recuerda a un par de carretillas elevadoras conectadas para operar a la vez, de forma perpendicular al puesto de mando, como si de una macrocarretilla retráctil se tratase. Insólito, a la vez que hipnótico. Alucinante.
El caso es que en menos de un minuto la grúa se lleva el coche y libera el hueco que haya podido ocupar el dueño del vehículo de forma molesta para los demás. Si Memphis Raines volviera a las andadas —no, por favor—, lo mismo abandonaba lo de perpetrar robos de coches a toda mecha y se nos hacía gruísta municipal.
