Las propuestas de vehículos aéreos han proliferado en los últimos años y entre ellas encontramos la recién presentada por AMSL Aero. Se trata del Vertiia, un pequeño avión eléctrico eVTOL, es decir, capaz de aterrizar y despegar verticalmente, y puede operar tanto con batería como con hidrógeno. Se espera que esté operativo en 2023 como ambulancia aérea.
Este Vertiia de la empresa australiana AMSL Aero ha sido desarrollado en conjunto con la Universidad de Sydney y Mission Systems, compañía especializada en tecnología autónoma para vehículos, y el desvelado es un prototipo previo a la realización de pruebas en entorno real. Además, está respaldado por el gobierno australiano, que ha invertido tres millones de dólares, unos 1,8 millones de euros, en este proyecto.
AMSL Aero ha firmado un acuerdo con la empresa CareFlight, una organización benéfica que ofrece servicios de aeromedicina, por lo que este Vertiia le viene como anillo al dedo como ambulancia capaz de surcar los cielos y llegar rápidamente a lugares inaccesibles. Así, prometen que esté operativo como vehículo volador de cero emisiones para emergencias médicas a principios de 2023.
El Vertiia toma así un primer cometido diferente a otros vehículos voladores similares y enfocados esencialmente a servicios de taxi, como es el caso del desarrollado por EHang, en el que ha invertido Toyota o los prometidos por Uber Elevate, que también esperan estar funcionando en 2023.
Una ambulancia aérea a 300 km/h
Equipado con ocho rotores eléctricos que van acoplados a dos ejes exteriores de fibra de carbono, uno colocado en la cola de la cabina, de aerodinámicas líneas, y otro en su parte delantera. En ellos los propulsores se distribuyen cuatro a cuatro.
Esta arquitectura permite al Vertiia inclinarse para realizar despegues y aterrizajes verticales, mientras que cuando alcanza la altura suficiente vuelve a disposición horizontal para activar el modo vuelo. Además, contar con ocho motores le permite prometer una mayor fiabilidad, pues podría seguir volando si fallara alguno.
También dispone de hasta cuatro alas que se despliegan en el eje posterior, acompañando a los motores traseros y facilitando el flujo del aire cuando alcanza cierta velocidad. AMSL Aero asegura que su vehículo volador es capaz de alcanzar una velocidad de crucero de 300 km/h.
En cuanto a la autonomía, la prometida es de hasta 250 kilómetros si va equipado con baterías, aunque si opera con hidrógeno, que dicen que está preparado para ello, pero que no han probado aun, podría llegar a un máximo los 800 kilómetros de rango. Según AMSL Aero la opción de pila de combustible es la más razonable para el segmento de los eVTOL.
Asimismo, y aunque en su presentación estará pilotado, el objetivo del Vertiia es que prescinda de conductor y que vuele de forma autónoma, como ya prometen otras propuestas similares. Aunque ese horizonte se ve aún lejano pues depende de que regulación lo permita.
Sea como fuere, aun quedan poco más de dos años para verlo en acción si cumplen con los plazos, ya que aún queda camino por recorrer en su desarrollo. Su cometido bajo la alianza con CareFlight será el de acceder a zonas remotas para atender emergencias médicas, pudiendo aterrizar y despegar sin necesidad de pista de aterrizaje.
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