Los problemas con los que se topan los vecinos de Londres cada verano, cuando llegan los veraneantes adinerados a pasear sus supercoches por la ciudad, no son nada nuevo. Hemos hablado de ello en varias ocasiones, pero ahora las administraciones de Kensington y Chelsea, dos de las zonas con más problemas al respecto, quieren criminalizar este tipo de actividades.
Circular con la música a todo volúmen, las aceleraciones en plena calle o el hecho de revolucionar el motor para montar escándalo, son algunas de las cosas que se quieren evitar. ¿Y cómo? Pues endureciendo la normativa al respecto para "disuadir a estos conductores de estos comportamientos antisociales", en palabras de Tim Ahern, miembro del consejo de medio ambiente.
Estas medidas para controlar el tránsito de superdeportivos por las calles de Londres, que aún han de aprobarse, llegan tras años de protestas vecinales. Tocar la bocina, conducir en caravana o dejar el coche arrancado sin circular, son algunas de las cosas que también quieren prohibir. "Se sabe que hay coches caros haciendo carreras por Knightsbridge o aparcando para revolucionar sus motores", afirma Ahern, y esto es precisamente a lo que quieren poner fin.
Foto | Streetcarl (flickr)
Vía | London Evening Standard
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