Tal y como ha podido saber la publicación australiana CarAdvice durante la presentación a prensa del Renault Mégane 2016 en Portugal, la próxima generación del Renault Mégane RS podría seguir el mismo camino que tomó su hermano pequeño, el Renault Clio RS, mediante un motor de menos cilindrada y también turboalimentado, y un cambio automático EDC de doble embrague.
Según esta revista, Renault habría decidido despachar el motor 2.0 litros turbo, que si bien da buenos resultados en cuanto a prestaciones, tiene poco margen de mejora en cuanto a consumo y emisiones. En su lugar se recurriría al motor 1.6 turbo del Clio RS, aunque ajustado para dar una mayor cifra de potencia, y probablemente junto a una caja de cambios automática EDC, de doble embrague y seis velocidades.
El prototipo que adelanta la versión más potente y deportiva del Renault Mégane, que mantendría su configuración de tracción delantera, podría desvelarse en el próximo Salón del Automóvil de París, en el mes de septiembre, aunque el modelo no llegaría a la calle hasta el año 2017.
Fuente | CarAdvice
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