Un poco de historia: El año 2000 fue el elegido por Audi para presentar un nuevo Audi A6, esta vez era un concepto casi nuevo, un vehículo familiar pero con prestaciones camperas. Se trataba del Audi A6 Allroad, una berlina familiar de lujo que disponía de una mayor altura al suelo, unos parachoques plásticos anchos y entre otras cosas, con solo pulsar un botón se conectaban las marchas reductoras, todo un lujo para los amantes de los deportes de aventura.
Y este primer Allroad, o todo camino, dió paso a la segunda generación de este peculiar Audi A6, sin reductora y más fino en su diseño. Por fin, para los que no necesitaban un Audi A6, si no un familiar, Avant o ranchera, más compacto y pequeño pero sin renunciar a las prestaciones del primero, nació el Audi A4 Allroad.
En la prueba de este Audi A4 Allroad, puedo deciros que he disfrutado del coche de lo lindo. He podido viajar por carretera con el nivel al que la marca germana nos tiene acostumbrados, suavidad, comodidad y lujo, rodando por caminos embarrados cuando me apetecía salir del asfalto sin ningún problema.
Para llegar a este todo camino, Audi ha reutilizado la fórmula del Audi A6 Allroad: sobre el chasis y carrocería del A4 Avant, ha subido la altura libre al suelo, ha reforzado y protegido determinadas piezas y como no, ha adaptado la mecánica. En lo único que se diferencia es en no montar la suspensión neumática del Audi A6 Allroad.
Claro está que no es tan fácil como parece, aunque el resultado es bueno, bonito…y muy caro. Este Audi A4 Allroad por supuesto, monta tracción integral Quattro, que funciona mediante un diferencial central autoblocante de accionamiento mecánico, de tipo Torsen, que reparte el par en un 60% al eje trasero y un 40% al delantero, así las sensaciones deportivas que siempre anuncia la marca quedan resueltas.
Exterior
Aunque todo este Audi A4, está basado en el modelo original, el Avant, no todo es igual. Sus dimensiones exteriores varían con respecto a las de un Audi A4 Avant convencional. La batalla es la misma pero el ancho entre vías aumenta, en parte por las dimensiones de las llantas, siendo 1,5 cm más ancho. Al elevar la carrocería del suelo su altura crece en 6 cm y dispone de 2 cm más de anchura.
De una sola mirada lo podemos confundir con su hermano mayor, el Audi A6 Allroad, aunque, al fijarnos, notamos las diferencias: una longitud y envergadura menores. El frontal dispone de la típica parrilla de la casa con aspecto de “traga kilómetros”, los faros antiniebla en ópticas redondas a ambos lados del parachoques y un detalle: la protección frontal en acero.
Esto, junto a las ya típicas luces tipo led de sus faros y los retrovisores del color de la carrocería, hacen que su aspecto sea más el de un deportivo que el de un todoterreno, cosa que la marca alemana se ha empeñado en mostrar en todos sus modelos.
El lateral resalta por unas llantas de 17 pulgadas, de diseño específico, con unos neumáticos de perfil 55, lo que nos limita a la hora de pasar por largos caminos de nieve o barro. Están enmarcadas en unas aletas plásticas que lo protegen de ramas y arañazos fuera de la carretera y le dan un toque más “agreste” al conjunto.
La trasera, con un amplio ventanal y un acabado casi de coupé en su cristal, está rematado por las dos salidas de escape, cromadas, al igual que la protección trasera, en aluminio. Una bonita mezcla de practicidad y deportividad, algo esto último, de lo que no nos olvidamos con este Audi.
Interior
El puesto de conducción de este Audi A4 Allroad no difiere en absoluto del de la versión familiar o Avant. Los asientos delanteros son muy cómodos y sujetan perfectamente el cuerpo en curvas, sea cual sea tu tamaño. La regulación de la altura y profundidad del volante, banqueta y respaldo es cómo no, eléctrica.
La disposición de los mandos está orientada hacia el conductor y permite manejar todo de manera intuitiva. Desde su volante multifunción y sin levantar la vista de la carretera, disponemos del control de audio, navegador, teléfono y ordenador de abordo. Las plazas traseras son ideales para dos pasajeros adultos, aunque son amplias y muy cómodas el tercero en discordia no disfrutará tanto de su sitio, el central, si ya no es un niño.
Como este Audi está orientado a personas dinámicas y deportistas o familias, sus asientos traseros se pliegan aumentando el maletero, que dispone en posición normal 410 litros de capacidad, por lo que transportar equipamiento deportivo como esquís, palos de golf o una tabla de surf, es posible sin tener que utilizar la baca.
Además el fondo del maletero es reversible, perfecto para no manchar la tapicería con botas con barro, nieve o agua al darle la vuelta y disponer de su lado plástico. Como no, el ambiente general es de auténtico lujo gracias a la combinación de elementos típicos de la casa, como las maderas, cuero, metales o los distintos tipos de materiales plásticos, agradables tanto a la vista como al tacto.
En Motorpasión | Audi A4 Allroad 3.0 TDI, miniprueba (parte 2)