En Estados Unidos, a diferencia de nuestro país, cuando alguien conduce de forma temeraria, se le persigue y se montan medios para detener el infractor. En España o la policía se entera o como mucho se llevará el flashazo de un radar. Hoy os traemos una persecución americana que si no fuese real, parecería una broma. Me encanta este género de noticias.
La noche del pasado día 11, casi a las 4 de la mañana, unos agentes estaban persiguiendo a un coche que iba a todo gas (para sus carreteras), algo más de 200 km/h (128 mph). Ante la dificultad de la interceptación segura, se piden refuerzos más adelante, y se monta un control. El fugitivo no hace caso a las señales de los agentes.
Pero las bandas de clavos colocadas en la autovía consiguieron destrozar los dos neumáticos izquierdos del coche, logrando la detención del sospechoso. Aquí es cuando empieza lo divertido. Primero, era una mujer. Segundo, iba prácticamente en pelotas, solo llevaba un top transparente, tanga y zapatos de tacón.
Las imágenes están censuradas porque como todo el mundo sabe en ese país, ver una teta translúcida es malo, y si son dos, peor aún. Se trataba de Erin B. Holdsworth, una chica de 28 años, que no solo circulaba a braga quitada, sino que además iba borracha como una cuba, se negó a hacer el control de alcoholemia y la lió parda en el coche patrulla (como el que caza a un tigre).
Menos mal que el Ford Crown Victoria es espacioso detrás, porque la mujer en cuestión parecía estar poseída ya bajo arresto. Le han acusado de conducción temeraria, conducir borracha, resistencia a la autoridad, exceso de velocidad, conducir con el carnet caducado… y quizás tiene algún cargo por escándalo público.
Estas cosas solo pueden pasar en Estados Unidos. Una cosa es parar a una Jenny que lleva a los churumbeles sueltos en el asiento trasero sin cinturón, con la ITV caducada… o encontrar al del Pim Pam, toma lacasitos. Nos llevan años de ventaja. Esto sí que es una persecución de película.
De haber pasado esto en España, algún funcionario de la DGT habría cogido la foto del radar, y tras examinarla con lupa, seguro que la habría guardado en un cajón para su disfrute personal y no habría pasado nada. Erin está en libertad con cargos, y tendrá que acudir a una cita con la justicia el próximo día 2.
¿Qué demonios pasó por la cabeza de esta mujer la noche de los hechos?
Vídeo | Youtube
Vía | El blog del Becario – 20 Minutos
Fuente | Fox8