La necesidad de rebajar la media de emisiones de CO₂ de los coches vendidos a valores máximos de 95 g/km hace que algunas marcas propongan soluciones originales. Es el caso de Mercedes-Benz que propone por primera vez en el mercado un híbrido enchufable asociado a un motor diésel.
Tras el Clase E 300 de y pudimos probar brevemente propone el Clase C 300 de con el mismo sistema. Este original modelo, que goza de la etiqueta CERO, ya tiene precio para España. Mercedes-Benz ya acepta pedidos de este híbrido enchufable, cuyo precio de partida es de 55.375 euros.
La idea detrás del Mercedes-Benz Clase C 300 de es sencilla. El motor diésel es el que menos CO₂ emite junto con un híbrido enchufable. ¿Por qué unir los dos sistemas? En lugar de asociar el híbrido enchufable a un motor gasolina, se asocia a un motor diésel.
En este caso se trata de un 2.0 litros turbodiésel de cuatro cilindros asociado a un motor eléctrico y una batería de iones de litio de 13,5 kWh. El motor diésel entrega 194 CV y 400 Nm, mientras que el propulsor eléctrico ofrece 90 kW (122 CV). En total, este sistema asociado a un cambio automático 9G-Tronic de nueve relaciones, entrega 306 CV con 700 Nm de par motor disponibles desde tan sólo 1.400 rpm.
Mercedes-Benz habla de un consumo medio de 1,6 l/100 km (ciclo NEDC) con emisiones de CO₂ entre 31 a 42 g/km para la berlina y de una autonomía en modo eléctrico de 53 km (ciclo WLTP). En cuanto a prestaciones, el C 300 de berlina ejecuta el 0 a 100 km/h en 5,6 segundos, mientras que el Estate lo despacha en 5,7 segundos. En ambos casos la velocidad máxima está limitada a 250 km/h. En modo eléctrico, la velocidad máxima es de 130 km/h, más allá de ese valor, el motor diésel vuelve a ponerse en marcha.
Una de las dificultades de crear un híbrido-diésel es la contradicción de uso que suponen los dos modos de propulsión. Un híbrido busca minimizar el uso del motor al máximo, mientras que el diésel necesita funcionar a una temperatura suficientemente elevada y durante un tiempo prolongado para que sus filtros de escape funcionen bien. Para solucionarlo, Mercedes-Benz recurre a un sistema de "regeneración del filtro de partículas" que quema los residuos del escape subiendo su temperatura.
El motor eléctrico puede incluso aumentar de forma precisa la carga del motor de combustión para alcanzar la temperatura de los gases de escape necesaria para la regeneración. La electricidad generada en este proceso se utiliza para cargar la batería.
El Mercedes-Benz C 300 de ya se puede pedir en las concesiones de la marca desde 55.375 euros con carrocería berlina y desde 58.000 euros para la carrocería Estate. Las primeras entregas se harán en septiembre de 2019.
Mercedes C 300 mild hybrid
El fabricante alemán inicia también la comercialización del Mercedes-Benz C 300 mild hybrid de 48V o de hibridación suave. El nuevo C 300 está disponible en carrocerías berlina desde 50.125 euros y Estate desde 52.100 euros.
Cuenta con un cuatro cilindros turbo de 2.0 litros asociado al motor de arranque-alternador por correa EQ Boost de 14 CV y 160 Nm. Al final, el C 300 desarrolla 258 CV. Asociado a un cambio automático de 9 relaciones, efectúa el 0 a 100 km/h en 5,9 segundos.
Es el segundo Clase C mild hybrid que propone Mercedes tras el C 200, que pudimos probar y que no terminó de convencernos.
