Tal y como ha asegurado un directivo del fabricante italiano Maserati a la agencia británica Reuters, la marca no quiere fabricar más de 75.000 unidades anuales, para mantener así la exclusividad de sus modelos. Y todo esto cuando se han marcado el objetivo de vender 50.000 coches en 2015 gracias a sus nuevos modelos como el Quattroporte y el Ghibli.
En la fábrica de Ferrari en Maranello la producción ya se ha limitado a 7.000 unidades, y parece que el grupo italiano quiere limitar también el número de vehículos que salen de las líneas de producción de Maserati. La firma estima que alcanzarán la cifra límite de 75.000 unidades en 2018. El año pasado, por ejemplo, comercializaron apenas 15.400 unidades, aunque este año 2014 pinta bastante mejor y esperan, al menos, doblar las ventas.
El futuro de la compañía es prometedor gracias precisamente al Ghibli, un sedán de acceso a la marca con un precio relativamente ajustado, al futuro SUV Levante y a otros modelos como el Alfieri (que debería llegar a la serie) o el renovado GranTurismo, planeado para 2018. Sea como fuere, hay Maserati para rato, pero manteniendo cierta exclusividad.
Vía | Reuters
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