En los 90 este titular hubiera parecido el argumento de una película, pero ahora va a ser real.
El gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, demandará a la Administración de George Bush por no permitir establecer su propia normativa respecto a las emisiones contaminantes de los vehículos.
Existe una ley que permite a los distintos estados fijar su propia normativa de emisiones, siempre y cuando la EPA (Agencia de Protección Medioambiental) esté de acuerdo. El pasado 19 de Diciembre, la EPA cambió su forma de actuar no permitiendo que California aplique su normativa más restrictiva, alegando que ya se ha aprobado una ley de este tipo a nivel federal y no hace falta que California aplique la suya propia.
La lectura política que hay detrás son las amistades del gobierno Bush con los fabricantes de automóviles, que no quieren aumentar gastos por hacer coches menos contaminantes. La medida que California quiere aplicar reduciría, según sus cálculos, en 17,2 millones de toneladas de CO2 las emisiones, frente a los 7,7 millones de toneladas que resultarían de la aplicación de la normativa federal.
Vía | El Mundo Motor