En España hace tiempo que no se comercializa, pero sí pudimos disfrutar de este pequeño coupé 2+2 híbrido con cambio manual, un coche quizá un poco justo de potencia pero con una conducción muy entretenida. Creo que es el híbrido más divertido que he probado, al margen de los que llevan un enorme motor de combustión y una pequeña ayuda eléctrica.
Este modelo se sigue vendiendo en Japón y ahora la marca nipona lanza una edición limitada con el nombre de Final Label Edition... No suena muy bien para el Honda CR-Z ¿no? Todo apunta que es el último coletazo de este modelo, al menos tal y como lo conocemos actualmente.
Llantas bicolor exclusivas de 17 pulgadas y colores específicos para esta serie limitada que incluyen decoraciones en dos tonos para conseguir todavía más exclusividad. Por dentro mucho negro, anagramas en los respaldos de los asientos y una placa identificativa.
Con un propulsor híbrido gasolina-eléctrico de 130 CV de potencia y 190 Nm de par motor, el CR-Z no es un deportivo de altas prestaciones, pero sí acelera desde parado con mucha soltura a baja velocidad es muy divertido. Esto es gracias en parte a la caja de cambios manual, sí, sí, es un híbrido con cambio manual, aunque como opción hay disponible una aburrida CVT.
¿Será el último Honda CR-Z o sólo el último de esta generación?
