La Fórmula 1 ya ha llegado a Estados Unidos para su cita anual en el Circuito de las Américas en Austin, Texas. Los equipos ya tienen preparados sus box para la decimoséptima carrera de la temporada en la que Sebastian Vettel está obligado a conseguir un gran resultado si no quiere despedirse de sus opciones de llevarse su quinto mundial en favor de Lewis Hamilton.
Con el permiso de estos dos hombres, otro de los pilotos que serán centro de todas las miradas será Carlos Sainz. El piloto madrileño se estrena junto al equipo Renault después de que los franceses anunciase en el pasado Gran Premio Japón que prescindían de los servicios de Jolyon Palmer y que la llegada del piloto de Toro Rosso se adelantaba.
Y, de hecho, no ha hecho falta mucho tiempo para verle vestido de amarillo tras una agridulce despedida en Suzuka en la que el piloto de Red Bull -su relación con los de las bebidas energéticas seguirá vigente en su nueva etapa- tuvo que retirase tras cometer un fallo en la primera vuelta.
"Ha sido una bienvenida espectacular. La fábrica ya habla de la entidad de Renault. Está en obras, terminando las de ampliación, y ya hay 640 personas trabajando allí. Y, sobre todo, las instalaciones dan una idea del compromiso del fabricante francés para volver a lo más alto de la Fórmula 1. Es otra dimensión comparado con Toro Rosso" Carlos Sainz a El Confidencial.
El piloto español no perdía el tiempo y visitó a principios de semana la fábrica de Renault en Enstone antes de poner rumbo a su primer Gran Premio con la escudería francesa. A diferencia de si lo hubiese hecho la próxima temporada, Carlos prácticamente no tiene tiempo para adaptarse a su nuevo monoplaza antes de tener que jugarse sus primeros puntos.
Según él mismo ha confesado, ha tenido que trabajar duro para estudiarse en profundidad el funcionamiento de su nueva arma y en especial el volante. De hecho, el equipo modificará parte del mismo para que se asemeje más al que tenía en Toro Rosso y evitar así, errores innecesarios.
Un Campeón de Le Mans para Toro Rosso
El sustituto de Carlos Sainz en Toro Rosso es Pierre Gasly que, a su vez, devuelve su coche a Daniil Kvyat. No obstante, tal y como se comentó a su llegada a la categoría reina, el piloto de Red Bull aún tiene un campeonato pendiente de resolución.
La final de la Superfórmula japonesa tendrá lugar este fin de semana y Gasly está a tan solo medio punto del líder. Si bien en un principio parecía que el francés no fuese a volver a la categoría, según se ha rumoreado, Honda -con los que compite- no parecía dispuesto a perder el Campeonato tan fácilmente.
Tras varias versiones contradictorias, finalmente Red Bull anunció que le buscaría un sustituto. La sorpresa mayúscula llegó cuando anunciaron a un viejo conocido del Red Bull Junior Team: Brendon Hartley.
El piloto neozelandés al que echaron de su programa a finales de 2010, parece haberles convencido con su rendimiento en los últimos años. ¡Y no es para menos! Hartley fue uno de los Campeones de esta edición de las 24 Horas de Le Mans con Porsche.
Ahora, queda ver si su rendimiento en monoplazas está a la altura de lo esperado. De ser así, podría ser un candidato más al listado de pilotos que podrían sustituir a Kvyat en 2018, en caso de que finalmente se decidiesen por ponerle de patitas en la calle.
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