Ahora mismo Ford lo está pasando muy mal en Europa por la crisis de la deuda soberana, van a perder 1.500 millones de dólares solo este año. No es un problema vital, porque el mercado norteamericano tira del carro con enormes beneficios. En los tres primeros trimestres ya han ganado más que en todo 2011.
Se considera que en ese mercado tener un 5% de margen de beneficio es bueno, pero Ford ha tenido más del doble. Ahora bien, se están dando cuenta de que eso no va a durar, porque los coches pequeños (Fiesta y Focus) empiezan a ganar terreno a la vez que descienden las ventas de SUV y pick-up, que dejan más dinero.
Los Escape (Kuga) y Fusion (Mondeo) son mucho más rentables que los modelos a los que han reemplazado, consecuencia de que son globales. Ahora bien, las ventas de coches pequeños dejan menos beneficio, son más baratos, así que esperan que sus beneficios bajen hasta el 8-10% de media.
No es una buena noticia para Ford que baje su beneficio, ya que en Europa trabajan a pérdida. En Sudamérica, casi, su margen de ganancia es del 1%, y van a tener que reducirlo por la necesidad de competir de forma más agresiva, especialmente por el tirón del mercado brasileño.
Recordemos que en Europa se van a cerrar tres fábricas: Dagenham (estampación), Genk y Southampton, y van a despedir a 6.200 personas. En EEUU la gente cambia a coches más pequeños principalmente por el aumento brutal de los precios del combustible y porque también tienen crisis, aunque no tan salvaje como aquí.
En su tierra natal, Ford es capaz de dar empleo, y han sido capaces de salir del agujero de 2008 sin el dinero público de Washington D.C. Pero no pueden relajarse y afrontar esta reducción del beneficio, los coches pequeños son necesarios, si no los venden ellos, los venderá la competencia, así que la solución no va por ahí.
Vía | Automotive News