Quizá sea mucho imaginar porque no todos tenemos un Ferrari F430 GT3, pero esto es lo que le pasó a uno de los pilotos del Campeonato de GT del Reino Unido. El jueves pasado llegó a un hotel del pueblo de Hethersett en su coche con el que llevaba un remolque donde iba el Ferrari F430 GT3 que usa en la competición.
Lo dejó estacionado en el aparcamiento de gran capacidad del hotel y el viernes cuando se levantó, se encontró que le habían volado el remolque con el Ferrari F430 GT3 dentro. Por lo que vieron por las cámaras de circuito cerrado del hotel, entre las 20:23 y las 20:29 los ladrones llegaron con una Mercedes Sprinter de batalla larga, rompieron el enganche del remolque y se lo llevaron.
Así que Phil Burton, que así se llama el piloto, se quedó con dos palmos de narices y sin Ferrari F430 GT3. Este coche de competición lleva un motor V8 4.3 de 550 CV y pesa 1.219 kg en vacío. Se habla de un robo por encargo, desde luego no debe ser nada fácil ocultar un coche de estas características y parece haber sido bastante preparado, la policía ya está investigando el robo.
Hay gente con poca suerte…
Fotografía | Flickr (Pauls imaging)
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