Hay gente que nace con estrella, y otros que nacen estrellados. Yo debo ser de los del segundo grupo, porque me parece que en la vida voy a tener la suerte de encontrar un Camaro Z28 del 71 por menos de 1.000 euros y que funcione. Pero así son las cosas en Estados Unidos, todo puede pasar…
Y eso es lo que le pasó a Clayton Romie mientras volvía a casa, se encontró con este 1971 Chevrolet Camaro Z28 mientras conducía, y sin pensárselo dos veces se acercó a preguntarle al dueño si lo vendía. Dicho y hecho, casi se lo lleva puesto a casa.
Tras una difícil restauración, sobre todo en el trabajo de pintura, le ha quedado esta belleza, toda ella pintada de un negro resplandeciente y no quiero ni pensar en lo que debe sufrir para dejarlo bien limpito. Me pasa a mí con mi Focus, y no es ni la mitad de brillante que este.
El motor fue otro de los quebraderos de cabeza de Clayton, y no estaba dispuesto a restaurar el motor de serie desde cero, así que se decidió por una de las mejores preparaciones de Danger Mouse, según Super Chevy. Se trata de un motor V8 de 355 ci (5.817 cc) que rinde 328 CV a 5.550 rpm y da 537 Nm de par máximo a 3.850 rpm. Aunque sean cifras altas, no son exageradas para lo que estamos acostumbrados a ver en los hot rods, como por ejemplo en el Bel Air del 56 con 750 CV que publiqué hace un tiempo.
Y el interior no desentona para nada con el exterior. Todo en negro y muy sobrio, sobre todo los asientos, provinientes de un Honda Prelude y retapizados en cuero negro.
Como he dicho antes, una preciosidad. A esto si que se le podría llamar un oscuro objeto de deseo...
Vía | Super Chevy (en inglés)