Cualquiera puede salpicar pintura a un Ferrari California T bajo el pretexto argumento de estar creando arte, pero pocos —o, mejor dicho, nadie— puede hacerlo con tanta destreza como Fabian Oefner y sus cubos de pintura UV.
El objetivo del artista es revelar la sensación de la velocidad a través de la forma. Para ello, Fabian Oefner y el equipo encargado de la producción del vídeo unen fuerzas para crear arte automovilístico utilizando un cuarto tan oscuro como las noches de febrero, gotas de pintura que recorren la carrocería como si se tratara de cometas por el cielo, y un túnel de viento que acaricia al Cavallino Rampante a 241 km/h, como si intentara declararle su amor.
Disculpad si he sonado cursi; efectos secundarios del vídeo. Para que lo disfrutéis sin preocupaciones, sólo hace falta deciros que esa pintura UV no es permanente. Podéis mantener la calma y mirarlos directamente desde el canal de Vimeo de Ferrari USA.
Un escenario único para un desempeño único
Una mirada al interior del Arte de la Forma
En Motorpasión | Ferrari California T