Estos monstruos a los que llaman acertadamente Monster Truck, aunque de “truck” tengan ya bien poco, son unas impresionantes pick-up (algunos dicen que son más bien buggys) con ruedas de hasta 3 metros de altura, que montan unos generosos motores de unos 2.000 caballos para poder mover esas gigantescas ruedas y el nada despreciable peso total de más de 15 entre 6 y 9 toneladas.
Entonces, ¿cómo debe ser una competición de freestyle de semejantes mastodontes? Pues no hay más que ver el vídeo: saltan montoneras de coches (¡y hasta un camión cisterna infiltrado por allí!) hasta destrozar unos cuantos con las ruedas al aterrizar, se estampan contra camiones, dan vueltas de campana… En fin, que luego nos querrán vender que el destrozo y los ostiones no son un reclamo suficiente para asistir a competiciones del motor… ¿veis algún asiento libre?
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