Uno de los mayores retos de los vehículos híbridos y eléctricos va más allá del reto que supone el almacenamiento de la electricidad. Ya sabemos que las leyes de la física nos permiten utilizar la frenada regenerativa como un sistema de recarga, ahora la aventura es ampliar ese principio para conseguir electricidad con otros movimientos del vehículo o, como en este caso, de sus componentes.
De la misma manera que los motores de combustión desaprovechan buena parte de la energía que producen en forma de calor, el movimiento generado en las suspensiones a consecuencia del funcionamiento normal del vehículo podría aprovecharse para recargar las baterías. Audi cree que es una buena idea, así que ya han presentado su apuesta con el sistema eROT.
Otra forma de conseguir energía es posible
Los amortiguadores convencionales se dedican a absorber las irregularidades del terreno y mantener la compostura en las curvas de forma improductiva hablando en términos de energía. Cada movimiento de la suspensión genera algo de calor que se disipa y se pierde. Pero, ¿y si sustituimos los amortiguadores convencionales (o de aire) por otro esquema que genere electricidad a partir del movimiento vertical de las ruedas?
Antes de nada, hay que quitarse de encima las tradicionales suspensiones con amortiguadores hidráulicos o neumáticos. El siguiente paso es implementar un nuevo esquema de engranajes unido al "brazo" de la suspensión que convierta el movimiento de rebote o compresión de la rueda en un giro.
Ahora que tenemos un movimiento circular el resto es coser y cantar, sólo hay que unirlo a un alternador capaz de producir electricidad del mismo modo que lo hace el alternador convencional de un coche colocado junto al motor. Con uno de estos pequeños sistemas en cada rueda conectado a una batería en el centro estaríamos consiguiendo un poco de electricidad en cada bache y cada giro.
De momento la idea está pensada para funcionar exclusivamente en el eje trasero por cuestiones de espacio, pero si realmente hace su trabajo y se optimiza el tamaño de los componentes podría extenderse al eje delantero. Según Audi, su eROT puede producir hasta 613 Watios en una carretera bacheada.
Aunque de momento esta tecnología es poco más que un prototipo, podría adaptarse tanto a sistemas de hibridación con los que se recarguen las baterías que impulsen los motores eléctricos, o bien en coches convencionales para hacer motores de combustión más eficientes, dedicando menos esfuerzo a la producción de energía para alimentar los sistemas eléctricos del coche.
Qué desaprovechada está la energía cinética y cuánto camino nos queda por recorrer.
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