Posiblemente McLaren sea una de las marcas más avanzadas del sector de la automoción. Centrados exclusivamente en crear superdeportivos, los británicos se centran en hacer de sus coches las piezas lo más avanzadas tecnológicamente posible, y en estos avances cada uno toma la dirección que cree oportuna.
Después de haber visto el intenso trabajo de aerodinámica que realizan, los de McLaren puede que estén desarrollando un plan estratégico específico para un futuro sostenible: los combustibles alternativos.
No todo son los coches eléctricos para McLaren
Pese a su pequeño volumen de producción, en McLaren también se van a ver afectados antes o después por las normativas anticontaminación de forma severa, y mientras otros buscan en la electrificación la solución a sus problemas, en Woking están barajando una hoja de ruta muy diferente.
Según ha declarado Jens Ludmann (COO de McLaren) a Autocar, la marca estaría estudiando la viabilidad de no recurrir a los coches eléctricos a través de una tecnología alternativa basada en los combustibles sintéticos.
Bajar las emisiones de CO₂ es un imperativo a medio plazo. Prácticamente todas las marcas (incluso la propia McLaren con el P1 desde 2012, del que ya se rumorea sucesor, o más recientemente el Speedtail) están recurriendo a tecnologías de electrificación antes de dar el paso a los coches totalmente eléctricos. Pero podría no ser el único camino a seguir para bajar la huella de dióxido de carbono.
Ludmann asegura que "la tecnología alrededor de los combustibles sintéticos aún está en desarrollo, pero si consideramos que se puedan producir empleando energía solar y transportada hasta los depósitos de los coches [sin costes ambientales] hay muchos beneficios potenciales". Esto sería partiendo de la base de combustibles sintéticos cuya combustión no emita CO₂, o lo haga en cantidades muy inferiores a la de los derivados del petróleo.
Según el directivo, los motores actuales sólo necesitarían algunas modificaciones leves para consumir este tipo de combustibles, ayudando a la amortización de la tecnología actual. En cualquier caso Ludmann postula que los coches impulsados por este tipo de combustibles limpios no sustituiría a los coches eléctricos, sino que podrían convivir en el espacio y el tiempo.
De hecho Ludmann postula que una de las vías que están barajando es la "posible combinación entre un motor térmico de combustible sintético y un sistema híbrido, haciendo que sea más limpio aún". No cree que haya que detener el avance en las tecnologías de electrificación, pero el COO de McLaren sí opina que "hay alternativas muy válidas que debemos considerar".
En Motorpasión | Renault Safrane Biturbo, o cuando Renault recurrió al tuning para enfrentarse a BMW y Mercedes... y le salió mal
