Uno de cada cuatro vehículos que se vendan en 2022 será eléctrico. Así lo ha previsto Industrial and Financial Systems (IFS), observando el ritmo de crecimiento del mercado y a pesar de que en 2017 estas motorizaciones sufrieron una contracción del 7,7% en comparación con 2016.
Industrial and Financial Systems es un especialista en software de empresa que cuenta con una división específica de Automoción. Su director industrial en este ámbito, Stefan Issing, tiene claras las barreras en la electrificación del parque de vehículos: por un lado la carencia de estaciones de recarga y, por otro, la capacidad de las baterías de cara a la autonomía.
En lo que toca a los puntos de recarga para vehículo eléctricos, largo camino queda por recorrer y ahí es donde deben mover ficha las administraciones. Actualmente, China es quien lidera el número de estaciones de carga, con un total aproximado de 150.000 estaciones de recarga públicas. El gigante asiático se ha marcado una meta: llegar a 2020 con soporte de recarga para cinco millones de vehículos.
Por otro lado, en cuanto a las baterías, IFS considera que el potencial para el desarrollo de las mismas es bastante alentador si atendemos a las cifras: la inversión por parte de fabricantes de baterías y marcas se estima en unos 193.000 millones de euros.
Puntos de recarga: asignatura pendiente en España
En nuestro país, las carencias son evidentes. Si atendemos a los datos de Electromaps, las estaciones de recarga eléctrica apenas superan las 2.000 y la mayoría están en las grandes ciudades, por lo que los viajes de larga distancia siguen siendo territorio vedado para los coches eléctricos. Teniendo en cuenta que actualmente hay casi 11.000 gasolineras en toda España, toca ponerse las pilas en esta materia. Y mucho.
Otro problema que encontramos es que la mayoría de puntos de recarga no son públicos. Es el caso de Madrid, que cuenta con 324 puntos de los cuales sólo 24 son de uso generalizado. El Ayuntamiento de la capital española ya ha prometido la instalación de 15 estaciones públicas más con 2020 como fecha límite. La cifra se antoja insuficiente si tenemos en cuenta el imparable crecimiento de los modelos eléctricos en el parque automovilístico.
Electrificación del parque automovilístico, ¿qué dicen las cifras?
A pesar de las trabas señaladas por IFS la realidad es que en 2016, el parque mundial de vehículos electrificados superó los dos millones, siendo más de 1,2 millones completamente eléctricos. Esto se traduce en que la demanda de las motorizaciones eléctricas ya supera a la de las híbridas.
Si nos centramos en Europa, el crecimiento durante 2016 fue de un 21%: medio millón de coches 100% eléctricos ya circulaban por las carreteras del viejo continente. En España, según datos del Ministerio de Industria, la cifra de los vehículos eléctricos a finales de 2017 se fija en más de 35.500 unidades.
Lejos estamos de nuestros vecinos europeos, con Francia a la cabeza con 139.377 modelos de propulsión eléctrica, seguido de Holanda (118.763 unidades), Reino Unido (116.237 unidades) o Alemania (105.664 unidades).
A años luz nos encontramos también de Noruega, que cuenta con la mayor densidad de coches eléctricos: con una población de 5,2 millones, encontramos 100.000 vehículos en activo, es decir 21,52 vehículos eléctricos por cada 1.000 habitantes.
Otro hándicap importante, y que no menciona IFS, es el precio: los modelos eléctricos son menos asequibles que los de combustión convencional. No obstante, lo que sí que es cierto es que los costes de producción se están reduciendo cada vez más gracias a la producción en masa de las baterías y al aumento de su capacidad, que disminuyen la inversión que deben afrontar las marcas.
En definitiva, el crecimiento en las ventas de los modelos eléctricos es un hecho, por lo que no es descabellado pensar que el 25% de los coches que se vendan dentro de cuatro años sea eléctrico. Prueba de ello es el reciente hito alcanzado por Toyota, que cerró 2017 con 1,52 millones de vehículos eléctricos vendidos en todo el mundo durante dicho periodo.
Es más, que el automóvil se encamina hacia la electrificación lo confirman iniciativas como 'Sustainable City' una ciudad cien por cien sostenible en pleno Dubai donde los coches de combustión interna están prohibidos. ¿Alguien habría apostado por ello hace diez años?
