La moda de lucir los supercoches crea problemas en Londres

La moda de lucir los supercoches crea problemas en Londres
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El primer Ferrari Enzo que vi en Londres. Le siguieron muchos más…

Si alguna vez habéis estado en Londres, os habréis dado cuenta de que es posiblemente la ciudad del mundo con más supercoches por metro cuadrado. Cuando llega el verano además, muchos millonarios de países árabes eligen la capital británica como destino de vacaciones y con ellos llevan sus coches.

Una de las modas más habituales en los últimos años, es sacar a pasear el superdeportivo y que todo el mundo te vea. Parece deporte nacional los sábados y domingos por la tarde, sobre todo por las calles de los alrededores de Harrod´s pasar con tu supercoche y ser el que más llama la atención.

Hay gente que se dedica a hacer eso toda la tarde, haciendo sonar los escapes en vacío e incluso deleitando a los viandantes con alguna que otra derrapada. Te puedes sentar en una terraza detrás de Harrod´s y ver pasar 15 veces seguida al mismo Lamborghini, el mismo Ferrari y el mismo Pagani Zonda. Pero también esta moda está generando problemas…

Y es que como es lógico, no a todo el mundo le tiene que gustar escuchar el sonido del motor de un Lamborghini a 8.000 revoluciones. Ni a todo el mundo le gusta ver venir hacia ti un coche derrapando cuando estás a punto de cruzar la calle.

En el vídeo podemos ver un claro ejemplo de dos viandantes que recriminan a un conductor de un Lamborghini que hizo sonar el motor de forma escandalosa en una calle atascada. Como es lógico, le dicen que ellos no tienen que aguantar el ruido de su coche y el conductor del Lambo, se pone más chulo todavía.

Las autoridades están ya tomando cartas en el asunto. El año pasado durante el verano la policía se puso más estricta con los supercoches aparcados en las calles en lugares prohibidos, y de ahí que se pudiese ver un Koenigsseg y un Bugatti Veyron con dos cepos en la puerta de Harrod´s.

Lo mismo ocurre en otras calles de los alrededores, y no me extrañaría que en breve comiencen a poner medidores de sonido y a multar a todos aquellos que superen el límite de decibelios. Lo malo es que para la gente de ese nivel económico, la multa económica no es suficientemente importante como para disuadirles. ¿Decomisión de supercoches tal vez?

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