Recientemente salió el anuario estadístico de la DGT para 2009, sinónimo de que ya conocemos todos los datos desglosados sobre accidentes de tráfico en España, contando la mortalidad a 30 días, dentro y fuera de zona urbana. Los resultados que se dan a primeros de año son siempre a 24 horas y fuera de población (carretera).
En 2009 murieron en total 2.130 personas en carretera (la cifra provisional fue de 1.897 personas) y 584 personas en zona urbana, sumando 2.714 personas. Hubo 88.251 accidentes con víctimas, de los cuales 40.789 ocurrieron en carretera y 47.462 en zona urbana. Estos dados son a 30 días, los definitivos.
También se contabilizan los heridos, 62.928 en carretera y 62.038 en zona urbana, aquí apenas hay diferencias. Han bajado los accidentes, los muertos y los heridos. Aunque sigue siendo mucha gente, se continua en la espiral descendente de los últimos años. Pero veamos mejor los datos en detalle.
Antes de seguir adelante, conmino a todos vosotros a mirar en detalle el Anuario Estadístico 2009 por si alguien quiere discutir algún dato y hacerlo con fundamento. Todas las cifras que voy a dar en el artículo salen de ahí, salvo error tipográfico por parte de la DGT o por la mía.
El año más reciente en el que hubo tantos accidentes como 2009 fue 1997, con 86.067 accidentes con víctimas, y entonces hubo 5.604 muertos. Desde 1993 los datos de la DGT definitivos son a 30 días, de ahí hacia atrás se contabilizaban a 24 horas (otro motivo por el cual se mantiene esa estadística rápida).
Ha muerto menos gente tanto en zona urbana como en carretera, y ha habido menos heridos. Hasta la fecha, no ha habido ningún año con tan “pocos” muertos en relación al número de vehículos, así que podemos hablar de los “mejores” datos de siniestralidad de España considerando el contexto histórico.
Un poco de retrospectiva
Respecto al año 2008, ha habido 3.042 accidentes menos en carretera y 1.868 accidentes menos en zona urbana. En cuanto a muertos, son 386 menos. Descendieron notablemente los heridos graves, 2.565 menos, y los heridos leves (que también se cuentan desde 2006), pasando de 114.459 a 111.043, es decir, 3.416 menos. Por épocas, el verano sigue siendo la peor.
El medio de transporte más seguro continua siendo el autobús, con 21 víctimas mortales. En carretera, la mayoría de los accidentes ocurren con buen tiempo en lo climatológico, y con coches en aparente buen estado en lo mecánico. En carretera, más de la mitad de los accidentes son en recta, en zona urbana casi todos.
La causa de mortalidad principal ha sido la colisión entre vehículos o contra objetos, seguida de las salidas de vía. El grupo de edad con más víctimas continua siendo el de jóvenes de 24 a 35 años, y por sexos, los hombres siguen llevándose la peor parte, como pasajeros y como conductores.
Para encontrar un año con tan “pocas” víctimas de tráfico (muertos + heridos) hay que remontarse a 1995 (y no se contaban entonces los leves), solo que entonces hubo 5.751 muertos (a 30 días). En 2009 el parque automovilístico era de 30.855.969 vehículos, mientras que en 1995 hablábamos de 18.847.245 vehículos. ¿Pero y en relación al número de habitantes?
En 1995 había 1,4603 muertos en accidentes de tráfico cada 10.000 habitantes, mientras que en 2009 esa cifra baja a 0,5901, menos de la mitad. Contando las muertes a 24 horas y solo en carretera, en 1995 hubo 4.119 fallecidos, más del doble que en 2009 con casi el “mismo” número de víctimas.
En cuanto a peatones, la inmensa mayoría de las víctimas son personas mayores de 64 años, las más vulnerables por la degradación de sus condiciones psicofísicas. Este colectivo también se lleva la “palma” al volante, solo detrás de los jóvenes de 25 a 34 años. La experiencia es un grado, pero la juventud también.
Intentando sacar conclusiones
Coincido con varios analistas en que hay una brecha entre la cifra de 24 horas y la de 30 días, pero más que por manipulación estadística o por oscuros intereses, lo achaco a la renovación del parque automovilístico. Antes la segunda oportunidad consistía en evitar el accidente.
Hoy día la segunda oportunidad está en sobrevivir a los accidentes, los coches modernos dan bastante más oportunidades incluso cuando atropellan gente, y hay que mencionar obligatoriamente iniciativas como EuroNCAP, que a base de meter presión a los fabricantes han logrado salvar miles de vidas en todo el mundo.
Podemos hacer una analogía con Sudamérica, con un mercado mucho más desregulado. Allí la siniestralidad en relación al parque de vehículos o habitantes es muy superior. Ha empezado una iniciativa tipo EuroNCAP, se llama Latin NCAP, y empezó dando un notable tirón de orejas a los fabricantes… relación causa-efecto clara.
Si nos fijamos en los datos de 1995 y en los de 2009, la severidad de los accidentes cada vez es menor. Podemos especular y teorizar sobre la realidad o irrealidad de las pruebas de choque, pero está claro que tienen un efecto positivo para la mayoría de la gente.
La DGT no se cuelga la medalla, pero sigue creyendo que su política desde el Gobierno del PSOE surte efecto y la gente conduce de forma más prudente (de grado o por fuerza). No se puede negar esta influencia tampoco, aunque el grado exacto de impacto es realmente complicado de medir.
Creo que lo más justo es hablar de una victoria de la sociedad, que sigue progresando en el descenso de las consecuencias del cáncer de los accidentes de tráfico. Las conclusiones son las mismas independientemente de que la DGT tarde tiempo en publicar estos datos, y creo que deberían darle más publicidad a estas cifras que a las provisionales.
Fotografía | M. Peinado (I)
Fuente | DGT
En Motorpasión | Los muertos en carretera han vuelto a descender, ya van seis años consecutivos (hay algunas diferencias en las cifras, cambiaron del momento de la publicación a hoy)