Después de haber presentado el Mercedes-Benz EQC como la gran apuesta de futuro a medio plazo para un cambio de tendencia en la movilidad eléctrica, el gigante alemán de la automoción ha presentado hoy lunes una nueva propuesta que mira hacia un futuro aún más lejano en el tiempo y sostenible de cara a la movilidad urbana.
Se llama Mercedes-Benz Vision URBANETIC y es un concepto de coche eléctrico, autónomo y modular con el que Daimler pretende crear entornos más agradables para los ciudadanos y trayectos más placenteros para los viajeros que utilicen el coche.
Un coche modular para pasajeros y mercancías
La premisa fundamental a la hora de crear el Vision URBANETIC es que haciendo un uso inteligente y conectado de los coches autónomos del futuro se pueda reducir la congestión de los grandes núcleos urbanos al mismo tiempo que se reducen los niveles de contaminación.
Por un lado Mercedes-Benz propone que los sistemas que sean capaces de manejar un coche autónomo entre el tráfico de forma independiente, sin nadie al volante, al mismo tiempo estén conectados con las redes V2X para anticiparse a las necesidades de cada desplazamiento.
De esta manera, con una flota de estos vehículos autónomos conectados a una base de datos que gestionase las demandas de la infraestructura de un área concreta, los Vision URBANETIC podrían variar su comportamiento y colaborar en la creación de ciudades más limpias.
Otro de los puntos clave a la hora de idear el Vision URBANETIC ha sido el reto de integrar en un mismo concepto las tareas de transporte de pasajeros o de mercancías. Así, Mercedes-Benz asegura que su chasis de 5,14 metros de largo integra todo el tren de rodaje con electrónica, baterías y motores en la zona inferior, mientras que sobre la estructura se puede colocar bien un habitáculo para hasta 12 personas o una plataforma de carga para 10 palets (10 metros cúbicos de carga).
Cada uno de estos vehículos podrá hacer uso de ambas carrocerías ya que se puede cambiar de una a otra a través de un sistema hidráulico con el que sustituir la zona superior sin la necesidad de acudir a un taller para la operación.
En su configuración para pasajeros la cabina cuyo exterior se ha inspirado en el universo arquitectónico se reparte en tres zonas: pasajeros sentados en la parte delantera, pasajeros de pie en la centrar y una parte trasera con un aire más chillout. Todos los ocupantes pueden ver el exterior pero no se les puede ver a ellos desde fuera del coche.
Dentro, el Vision URBANETIC será algo así como un medio de transporte público con una pantalla de 360º que ofrece información sobre el trayecto en el techo, mientras que en el exterior el vehículo mostrará sus intenciones ya esté estacionado, en modo de conducción o vaya a arrancar para que los peatones sepan cómo deben moverse a su alrededor.
La propuesta de Mercedes-Benz para el futuro estará equipada en consonancia con una serie de cámaras y sensores específicamente desarrollados para reconocer con un alcance de 30 a 200 cm a los usuarios más vulnerables en carretera: los ciclistas y peatones. Además, el Vision URBANETIC también indicará a los usuarios de a pie si el vehículo les ha detectado a través de pantallas en el exterior del vehículo, algo más racional que el coche con ojos de Jaguar.
Como parece que va a ocurrir según las propuestas que nos llegan, no habrá propietarios unipersonales de coches en el futuro. Para subirte a un Mercedes-Benz Vision URBANETIC tendremos que hacerlo vía smartphone, como cuando solicitamos un Uber o un Cabify, registrando los datos en su lista de tareas para planificar de forma óptima las rutas.
Resumiendo la iniciativa de la marca de la estrella, el Vision URBANETIC es la intención de Mercedes-Benz para reducir el número de vehículos en las ciudades, pudiendo utilizar el mismo chasis para transportar a pasajeros o mercancías según las necesidades del momento, o incluso desplazarse sin ninguno de los dos módulos si fuera necesario.
