Estados Unidos es tan grande y tiene tanta población que todos los días genera cientos de noticias. Algunas de ellas son especialmente curiosas, como la que publicó el medio Arizona’s Family hace unos días.
“La policía persigue y detiene a un conductor de 10 años y encuentra a su padre supuestamente borracho en el asiento del pasajero”. Ese fue el titular que escogió el medio americano para contar un suceso que llama la atención y preocupa a partes iguales.
Conducía una pick-up enorme por la autopista en plena hora punta
Sobre las 15:30 del pasado día 2 de septiembre, la Policía Estatal de Arizona, Estados Unidos, recibió varias llamadas de conductores que circulaban por la autopista 101, una de las más transitadas del Estado, y habían visto a una pick-up roja haciendo zigzags entre el tráfico a gran velocidad.
La policía salió en búsqueda del vehículo que describían las llamadas, lo encontró y pidió al conductor que se detuviese. Aunque no hizo caso inmediatamente y hubo una persecución durante un periodo de tiempo que la policía no ha revelado, la persona que se encontraba al volante acabó parando en el arcén. Se trataba de un niño de 10 años.
Según Arizona’s Family conducía una Ford F-250, una pick-up bastante más grande que la Ford Ranger que conocemos en España. Cuando paró, la policía descubrió que su padre, un hombre de 49 años, viajaba en el asiento trasero con una botella de alcohol.
La policía detuvo al padre por múltiples cargos y se lo llevó arrestado a la Oficina del Sheriff del Condado de Maricopa. Estaría acusado, entre otras cosas, de permitir que un menor conduzca y de tener una botella de alcohol abierta dentro de vehículo. El niño de 10 años no se enfrenta a ningún cargo.
Foto: Arizona's Family