5 comentarios
HOY SE HABLA DE
A Stefan Erikkson le detuvieron primero por destrozar un Ferrari Enzo mientras competía contra un Mercedes por las calles de Malibú; luego mandaron a la cárcel a su esposa por conducir un SLR sospechoso de robo, sin carnet ni documentación. Y ahora llega el final de la historia: resulta que destrozaba coches que al parecer ni siquiera eran suyos; la policía le ha detenido por no pagar tres superdeportivos importados de Inglaterra, entre los cuáles seguramente esté el Ferrari Enzo.
Vía | gizmodo (Gracias Polromeu)
Más información | news.com