Vengo de leer un interesante artículo de opinión de Jalopnik en el que se habla de las teorías de la conspiración aplicadas al motor. ¿Hasta qué punto las grandes petroleras hacen y deshacen para que los coches más eficientes no lleguen a venderse o fracasen? Pues menos de lo que estáis pensando.
El autor reflexiona sobre los mitos y las realidades que hay detrás de todo esto. Cierto es que la industria del petróleo tiene mucha capacidad de hacer lobismo, pero otra cosa es hacer desaparecer de la faz de la Tierra a coches, patentes e incluso inventores, sin dejar rastro. Veámoslo en perspectiva.
Comparto con Michael Ballaban que hay mucha leyenda urbana y muy poco de realidad objetiva. Por ejemplo, se dice que el Volkswagen XL1 no se va a vender en Estados Unidos por ser excesivamente eficiente (0,9 l/100 km) y que eso atenta contra los beneficios de las empresas petroleras ("fuente":urbantimes.co/2014/04/volkswagen-xl1-green-cars). Esperad, que me eche unas risas.
El caso del Volkswagen XL1
Lo cierto es que el XL1 es un prodigio de la ingeniería en todos los sentidos. Híbrido enchufable, Diesel, menos de 800 kg, autonomía eléctrica de 50 kilómetros, casi el mismo rendimiento aerodinámico que un pájaro... pero su precio es superior a 100.000 euros. Es lo que cuesta hacer un coche así.
De todos los datos técnicos que os he soltado, os habéis quedado con el último. Esa es la única y la verdadera razón por la que el XL1 no va a ser un éxito de ventas a menos que el litro de gasóleo se ponga a 5 euros o más. De hecho, Volkswagen solo fabricará 250 unidades.
Por otro lado, el motivo real por el que el XL1 no se vende en Estados Unidos es porque no se ha diseñado para cumplir las normativas federales de homologación. Todas las unidades previstas son para Europa. No merece la pena el gasto de homologación para un puñado de coches. No es un Bentley, no se puede vender a ese precio aunque lo valga.
¿Y el General Motors EV-1, qué?
Buena pregunta. El mítico coche eléctrico de finales de los 90 que se ofreció en EEUU en régimen de leasing nació a raíz de un imperativo legal, el Zero Emission Mandate del Estado de California. En otras palabras, el que quería vender allí, o tenía un coche de emisión cero, o se iba del Estado.
General Motors, Toyota, Ford, Chrysler, Honda... se pusieron como locos a sacar coches de emisión cero, y de ahí nació el GM EV-1. No tenía marca como tal, era un experimento tecnológico que no se vendió. Los usuarios pagaban una cuota mensual y usaban el coche hasta que a GM le diese por requisarlos. Y eso acabó haciendo.
Ese coche fue mandado al desierto a convertirse en chatarra por varias razones. No era rentable, las cuotas no cubrían costes, y apenas requería mantenimiento. La legislación se relajó --por el lobismo, entre otras cosas-- y el barril de petróleo se abarató. No daba dinero, dejó de ser interesante, y obligatorio. El resto cayó por gravedad.
Otras conspiraciones que son puro humo
En más de un mensaje en cadena por correo electrónico, redes sociales e incluso Whatsapp se nos habla de motores de movimiento perpetuo, de agua, por energía eólica y si me apuráis, hasta con polvos de hada. Nada que pueda sostenerse con conocimientos de Física y Química de la ESO. Fantasías, en otras palabras.
La realidad es que los fabricantes están poniendo más esfuerzos que nunca en reducir el consumo de sus coches, les obligan las grandes potencias desarrolladas. Ahí la industria del petróleo tiene poco que decir. ¿Por qué Elon Musk (fundador de Tesla) no está enterrado en el desierto de Nevada con un tiro en la cabeza?
Desengañémonos, la industria del petróleo no es el Imperio del Mal. El inventor del motor de agua está en la misma isla paradisíaca que Elvis Presley, Jesús Gil, Michael Jackson, los Kennedy y los marcianos de Men in Black. Esa isla solo existe en la imaginación colectiva. Un poco más de rigor, por favor.
¿Entonces?
Si descartamos todos los productos milagro que pululan por ahí, sí, vamos a encontrar algunos inventos que pueden mejorar el rendimiento de los motores pero que no hacen milagros, ni violan las leyes de la física. ¿Y por qué no se aplican a la gran serie?
Los fabricantes sacan a la calle coches que han superado durísimas pruebas en todo tipo de condiciones climatológicas y de uso. Eso ha de tener una fiabilidad muy por encima a la de cualquier gadget electrónico o bien de consumo. No vale todo en esta industria, ha de cumplir unos estándares muy rígidos.
¿Por qué no todas las marcas sacan sus coches híbridos o con inyección de HHO? Si eso fuese rentable, el cliente lo aceptase, tuviese un precio razonable, superase las homologaciones, fuese fiable y se pudiese fabricar en masa sin complicaciones... ya sería así. Y eso es todo, no le demos más vueltas.
Y pese a todos los esfuerzos que ponen los fabricantes en sacar productos a prueba de fallos, hay problemas y tienen que hacer llamadas a revisión o mejoras al coche cuando pasan la revisión oficial (sin avisar, ni cobrar por ello). Es imposible fabricar con un 0,0% de fallos en cualquier industria.
Muchos coches fabulosos se quedan en el camino por culpa del consumidor. El consumidor que no está dispuesto a invertir en una tecnología más eficiente por motivos tan peregrinos como que "no es Diesel" o que no permite hacer viajes a la playa del tirón sin parar varias horas. La comodidad es lo que tiene.
Amigos míos, alternativas hay, y cada vez hay más. Simplemente el coche convencional es el más conveniente a nivel colectivo entre pegas y ventajas, y cambiar mentalidades lleva tiempo. El precio de la cotización del barril de petróleo es el auténtico agitador de conciencias. El resto está muy bien para rellenar libros y novelas.
Vía | "Jalopnik":http://jalopnik.com/the-mpg-conspiracy-theory-is-crap-and-heres-why-1562574926