Durante la Feria de Abril de 2017, nueve coches de Cabify fueron reducidos a cenizas por un incendio presuntamente intencionado. Más de un año después, la investigación realizada por el Juzgado de Instrucción número 8 de Sevilla ha señalado a un posible culpable: la Guardia Civil ha detenido a un taxista residente en la localidad donde tuvieron lugar los hechos y perteneciente a asociaciones en defensa del taxi, que están a su vez siendo investigadas por coacción y amenazas a las VTC.
El detenido, según publica el diario ABC, es natural de Castilblanco de los Arroyos, municipio de la provincia de Sevilla donde fueron encontrados en una finca el año pasado nueve vehículos quemados pertenecientes a la flota Cabify. La compañía VTC había trasladado un total de 20 automóviles de Madrid a Sevilla para reforzar los servicios durante la Feria de Abril: diez de éstos estaban estacionados cuando se produjo el incendio.
Una situación insostenible de violencia
La detención del presunto culpable tuvo lugar el miércoles de la semana pasada. Tras prestar declaración, el taxista fue puesto en libertad con cargos el viernes por la noche. El presunto autor pertenece a las dos principales asociaciones existentes en Sevilla en pos de la defensa del taxi: Solidaridad Hispalense del Taxi y Unión Sevillana del Taxi.
Y es que, durante la pasada Feria de Abril, los conductores VTC sufrieron ataques y amenazas y supuestas coacciones por parte de taxistas en relación a la parada ubicada en el aeropuerto de Sevilla. Hechos que están también siendo investigados por el Juzgado de Instrucción número 8 y que bien podrían tener relación con los nueve Cabify incendiados. Entre los principales sospechosos de las amenazas, se encuentran los dirigentes de la Solidaridad Hispalense del Taxi.
En total, 32 taxistas están siendo actualmente investigados por dichas coacciones, que no sólo han tenido como víctimas a los conductores de vehículos de transporte concertado, sino también a otros miembros del gremio. Las asociaciones del taxi defienden que no existe relación con el incendio presuntamente provocado, aunque siguen acusando a los profesionales VTC de intrusismo y competencia desleal.
Por su parte, la Unión Nacional de Autoturismos (Unauto), que acoge a las diferentes operadoras VTC, ha denunciado ante la fiscal jefe de Sevilla, María José Segarra, la "insostenible situación de violencia" que sufren por parte del taxi las empresas de transporte concertado, llegando a su culmen precisamente hace un año con el incendio de los nueve coches de Cabify.
La guerra interminable
El enfrentamiento entre las VTC y el sector del taxi está en plena ebullición, sobre todo desde que el Tribunal Supremo ratificara la propuesta de Ley que blinda al taxi respecto a las empresas de transporte concertado. Esta normativa, aprobada por el Ministerio de Fomento a través del Consejo de Ministros vía Real Decreto Ley, limita la concesión de licencias en una proporción de 30 a 1 en favor del taxi.
De igual manera, la nueva ley limita el territorio de acción de las VTC, que tendrán que realizar el 80% de los trayectos dentro de la CCAA donde han recibido la licencia, pudiendo ofrecer servicios fuera de sus límites sólo en un 20%.
Pese a que esta normativa exprés favorece claramente al sector del taxi y le concede buena parte de las reclamaciones que vienen solicitando desde la llegada de las VTC, con la competencia desleal o el equilibrio entre servicios como principales protagonistas, las asociaciones del gremio han tildado la medida de "insuficiente", considerando que no aporta "verdaderas garantías de futuro para el sector".