Acudir en jet privado a la Cumbre del Clima para defender el medio ambiente o mantener una normativa que obliga a las aerolíneas a realizar vuelos sin pasajeros en un perverso sistema de incentivos es de esas cosas a las que es difícil encontrar sentido.
Según han publicado varios medios locales, Lufhtansa tendrá que operar 18.000 vuelos prácticamente vacíos este invierno para no perder slot aeroportuario; es decir, derechos de despegue y aterrizaje.
Un sistema que promueve los vuelos fantasma
Las informaciones apuntan a que Brussels Airlines tendrá que poner a volar 3.000 vuelos vacíos o casi vacíos este invierno, un número que se eleva a 18.000 en el caso de Lufhtansa.
La razón de este aparente sinsentido (pues estos vuelos emiten casi lo mismo llenos que vacíos) radica en la normativa europea, que obliga a las aerolíneas a operar vuelos en al menos el 80 % de sus franjas horarias de despegue y aterrizaje programadas. De lo contrario, corren el riesgo de perderlas.
Con la pandemia y el parón en la movilidad, esta cifra disminuyó a un 50 %, pero solo durante el invierno. La Comisión Europea ha ampliado las reglas de exención de franjas horarias para el verano de 2022, lo que significa que las aerolíneas podrán utilizar el 64 %.
Ante esta situación, el ministro de Movilidad de Bélgica, Georges Gilkinet, ha escrito a la comisaria europea de Transporte, Adina Valean, para pedir un cambio en las normas y ha calificado la situación de "grotesca":
Ubuesque, c'est le terme!
— Gilki (@GeorgesGilkinet) January 7, 2022
Raison pour laquelle ces règles🇪🇺sur les slots ✈️doivent changer! https://t.co/tfOjPe2wBy
El slot aeroportuario son las franjas horarias que se le asignan a las compañías aéreas para que sus aviones puedan hacer uso de las instalaciones de la terminal, entre ellas los mostradores de check-in, las puertas, etc.
Pero es el slot histórico, los slots obtenidos con el paso del tiempo, los que las aerolíneas tradicionales deben mantener cumpliendo con un porcentaje determinado de vuelos acordados entre éstas y el gestor aeroportuario.
Según publica The Bulletin, Lufthansa planea cancelar 33.000 vuelos programados a finales de marzo debido a una caída en las reservas causada por la variante ómicron del coronavirus. Lo mismo ha anunciado Ryanair.
En los EEUU, la Administración Federal de Aviación ha aplicado reglas similares de uso de espacios hasta el 26 de marzo debido a la pandemia.
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