Siguen llegándonos noticias desde el Salón de Detroit, y en este caso nos fijamos en las novedades de la división de coches de lujo de la Ford para esta primavera, que ya pasaron por el Salón de Los Ángeles: los Lincoln MKS y Lincoln MKT, que es la versión familiar y algo más equipada.
Los Lincoln saldrán de casa con dos posibles motorizaciones de gasolina: EcoBoost V6 3.5 o Ti-VCT V6 de 3.7 litros, que rendirán según lo proyectado 370 CV a 5.700 rpm y 304 CV a 6.500 vueltas respectivamente para mover los 1.872 kg que pesará en la versión de tracción delantera y 1.940 en la de tracción total a través de la caja automática de seis relaciones SelectShift Automatic, común al nuevo Ford Fusion americano, que permite su uso pilotado.
Tanto el MKS como el MKT incorporarán el Lincoln Drive Control, que es un sistema automático que hace más suave la conducción ya que cuenta con algunas rutinas para responder de forma intuitiva a las órdenes de manejo que da el conductor y a lo que el propio coche encuentra a su paso por la carretera.
De forma añadida, en estos Lincoln es posible seleccionar el modo de conducción (Drive o Sport) para conseguir diferentes respuestas en cuanto a la firmeza de manejo, a la respuesta del acelerador y de la dirección, a los parámetros con los que operan los controles de tracción y estabilidad... donde todos esos valores se pueden configurar de forma personalizada.
Es el Continuously Controlled Damping (o "Suspensión de Control Continuo"), que la marca monta de serie en este coche, siendo el único de su segmento que lo hace. El sistema parte de la monitorización de los parámetros fijados hasta en 500 ocasiones por segundo, realizando unos 20 ajustes por segundo sobre el sistema de suspensión. De esta forma se consigue adaptar la amortiguación a cada circunstancia.
El Lincoln MKT incorporará, además, el airbag para cinturón en los asientos posteriores, que protege de forma especial a niños y personas mayores, los más vulnerables en caso de colisión. También se diferenciará del MKS en que montará el sistema Curve Control para reducir riesgos en la toma de curvas a una velocidad excesiva.
Por lo demás, Ford ha dotado a sus modelos de más alta gama de toda la asistencia a la conducción que incorporan otros vehículos de la marca, como el Control de Carril, el BLIS, el Active Park Assist, y toda la tecnología de conectividad presente en Ford Sync y MyFord Touch, que aquí lógicamente se denominará MyLincoln Touch. Diferentes nombres para un mismo producto.
