La marca checa presentará en la cita suiza su segundo coche de gas natural comprimido (GNC). Tras el Citigo CNG llega el Škoda Octavia G-TEC, con el motor 1.4 TSI de 110 CV. Puede funcionar tanto con gas como con gasolina, con una autonomía combinada (según homologación) de 1.330 kilómetros.
Ecológico y económico, a partes iguales. Las emisiones tóxicas se reducen notablemente, cumple Euro 6 y emite 97 g/km de dióxido de carbono. Eso se traduce en exención de impuesto de matriculación. El consumo de gas es 3,5 kg/100 km, lo que permite hacer 100 kilómetros con menos de 4 euros.
Con su depósito de gas puede hacer 410 kilómetros entre repostajes, tiene una capacidad de 22,14 litros. Esto en masa se traduce a 14,35 kilogramos. Los depósitos de gas son voluminosos, por eso no tiene "más autonomía", y es un combustible de baja densidad (necesita mucho volumen para menos kilos).
Si nos quedamos sin gas, puede hacer el doble de esa distancia a gasolina, aunque claro, con un coste económico que no baja del doble. Incluye el Stop&Start y regeneración de energía en las frenadas. Ningún TDI es competitivo en costes con esta versión.
Solo hay que ver que con 4 euros/100 km el consumo de gasóleo equivalente es de 2,97 l/100 km, y ni siquiera en la homologación los motores del Octavia hacen tan poco. El problema es el de siempre, que no hay ni 50 surtidores de gas en España a día de hoy, y están concentrados en grandes ciudades, casi todos de Gas Natural Fenosa.
El Grupo VAG apuesta claramente por el gas natural, ofreciendo modelos compatibles en sus marcas Audi, SEAT, Škoda y Volkswagen. El GLP ya lo han abandonado, después de apoyarlo unos años. Para los que piensen en el largo plazo, que descarten el Diesel, este sí que interesa.