REE es una joven empresa de movilidad eléctrica que, de momento, parece que ha captado la atención de un poderoso actor en la industria. Las plataformas REEcorner y REEBoard son un paso más en los vehículos eléctricos y su propósito es simplificar al máximo el diseño con chasis/baterías completamente planos.
La ubicación del resto de componentes se harían en el interior de las ruedas, y para conseguirlo se han asociado con la prestigiosa firma japonesa KYB Corporation, experta en sistemas innovadores de suspensión
Para REE la movilidad eléctrica no puede depender de conceptos del siglo pasado
Para REE "la movilidad eléctrica supone muchas oportunidades, pero no tiene sentido basar los vehículos eléctricos del futuro en conceptos del siglo pasado", según Ahishay Sardes (fundador y CTO de la compañía). La nueva generación de vehículos eléctricos tiene que ser independiente de los postulados tradicionales, con automóviles eléctricos planteados desde cero para sacar todo el provecho posible.
A partir de estas premisas están desarrollando dos variantes distintas. En primer lugar se encuentra la ambiciosa plataforma REEcorner. Más allá de adaptar el diseño de los vehículos conocidos, el chasis y la batería se fusionan creando un suelo totalmente plano sobre el que se añadiría una carrocería adaptable a las necesidades de cada propósito.
¿Y todo lo demás? En las ruedas. Todos los sistemas se han comprimido para ubicarse en el interior de las ruedas o cerca, así cada una de ellas alojará un motor in-wheel de altas revoluciones, transmisión, sistema de frenos con capacidad de regeneración by-wire, electrónica, suspensión y, si es necesario, también dirección. Parece un diseño simple, pero a nivel técnico es mucho más complejo.
Por otro lado la REEBoad es una versión a escala de la REEcorner, con un tamaño escalable. Su objetivo sería hacerse cargo de los repartos de último kilómetro, con vehículos de baja velocidad que podrían ir casa por casa dejando caer la mercancía en cada destino sin la necesidad de un operador humano.
En ambos casos, la compañía asegura que los costes de operación con estos sistemas se reducirán dramáticamente, contando además con inteligencia artificial capaz de monitorizar posibles fallos y pudiendo prevenir o solucionar algunas averías vía actualizaciones OTA.
Al utilizar todo el espacio disponible en el suelo para albergar baterías, la compañía asegura que puede conseguir una capacidad tres veces superior a la de los actuales vehículos eléctricos con un tamaño similar, con una reducción del peso del 33%.
Además de presumir de una extremadamente alta eficiencia, las dos plataformas son extremadamente modulares, lo que también se traduce en un teórico recorte de costes a la hora de adaptarse al propósito de cada empresa.
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