¿Qué es esto? Es un dinosaurio automovilístico de la industria de Detroit, y está cortado por el mismo patrón por el que se hacían los coches americanos en la época: a hachazos y con motores de autobús. Se llamaba Buick Electra, y este es de los últimos, ya que se fabricó desde 1959 hasta 1989.
Pues bien, General Motors registró a principios de mes de nuevo dicha denominación comercial con el ánimo de acabarlo comercializando. La gama actual de Buick comprende los modelos Verano (Opel Astra Sedan), Regal (Opel Insignia), LaCrosse, Encore (para 2013) y Enclave. ¿Será el nuevo Electra la berlina de segmento F que tanto necesita General Motors?
Es muy pronto para saberlo, pero desde luego el Electra fue durante años el coche más grande que vendió Buick y tuvo carrocerías sedán, familiar y descapotable. Con las connotaciones que tiene este nombre, no espero un coche pequeño. Quizás pasen años hasta ver un Electra por la calle.
Otra posibilidad que nadie debería descartar es que utilicen el nombre Buick Electra para remarcar el Chevrolet Volt, le pega, eléctrico-Electra, es algo más que un chiste malo. Ni que fuese la primera vez que un nombre comercial se resucita en el cuerpo de un coche que nada tiene que ver con sus antepasados.
Fuente | Automotive News