Plagiando el título del post de Carlos del Ferrari Enzo destruído en un pique con un Mercedes SLR, ahora es el turno de ver unas fotos, que también duelen al verlas, de un Ford GT nuevecito y destrozado.
Y es que parece que cuando se es tonto y se tiene dinero, la tontería se eleva a infinito, porque mira que hay que ser tonto para estrellar un Ford GT con dos días en la calle y 15 km recorridos (se puede ver que aún lleva las bolsas de protección en los asientos). ¿Para eso te tiras dos años esperando el coche y te gastas 168.000 euros en un coche? Regálamelo a mí y verás que bien cuidadito que lo voy a tener.
Resulta que el dueño, en un afán de sacar a relucir su maestría al volante, pisó el acelerador a fondo a la entrada de un puente, con la consiguiente pérdida de tracción y derrapaje del tren trasero, acabando estrellándose contra uno de los postes de acero y hormigón del puente. Pues menos mal que se ha estampado contra un poste de esos, porque si no va derecho al río a nadar con los patitos.
Ya lo han dicho antes en los comentarios de otra noticia, Dios da pañuelos a quien no tiene mocos…
Vía | Jalopnik
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