Con la prohibición de los detectores de radar desde principios de año, muchas compañías se han puesto manos a la obra para encontrar alternativas. El último invento se llama Target Blu-Eye y lo que detecta no son los radares en sí, sino la presencia de un vehículo de emergencia en un radio de unos 800 metros de distancia.
Y hablamos de vehículo de emergencia porque el sistema no es capaz de diferenciar entre un coche de policía, una ambulancia o un camión de bomberos, porque lo que capta son precisamente las señales de radio en frecuencia TETRA, que son las utilizadas por estos servicios de emergencia. El aparato no permite escuchar la conversación ni intervenir, pero nos avisa sonora y visualmente si hay presencia de este tipo de señales.
Mientras la empresa distribuidora en Reino Unido, CBS Automotive, asegura que este dispositivo se creó para evitar accidentes, advirtiendo a los conductores de la cercanía de vehículos de emergencia para facilitarles el paso, la policía está preocupada por el uso que podrían darle "los malos" que se dediquen al robo o al contrabando.
"Este aparato es un pasaporte para delinquir y no hay razón para que una persona que respete las leyes posea uno", asegura Ian Johnston, comisario de la policía de Gwent, Reino Unido. "Un criminal hará un intercambio de drogas, verá una luz en su salpicadero y se deshará del alijo ilegal, para volver a cogerlo cuando la policía no esté por la zona. Y un conductor estará sobrepasando la velocidad máxima en autovía, una alerta le avisará y reducirá su velocidad", continuaba.
La polémica está servida, con unos defendiendo las bondades del aparato y otros asegurando que es una carta en blanco para delinquir. Lo que no sabemos es si se extenderá mucho su uso, ya que el precio del aparato en cuestión es de 999 libras esterlinas, es decir, unos 1.265 euros al cambio.
Vía | Autoevolution