Mientras Bentley trabaja en el desarrollo de una nueva generación del Flying Spur, la división de vehículos especiales Mulliner ha aprovechado para crear una edición especial limitada del modelo actual, denominada Design Series, de la que se fabricarán exclusivamente 100 unidades, aunque estará disponible en las cuatro versiones de esta berlina: V8, V8 S, W12 y W12S.
En el Flying Spur Design Series todo comienza con un paragolpes específico (sólo para las variantes S), luces de bienvenida LED, proyección 'Mulliner' en el suelo, o detalles en contraste para la carrocería, disponibles en cinco colores, los cuales también se llevan al interior (Mandarin, Kingfisher, rojo Pillar Box, Blanco y Morado Azure). El W12 S suma además detalles de color negro en los faros delanteros o la parrilla, así como llantas de 21 pulgadas también en negro.
En el habitáculo el trabajo artesanal es la tónica principal de este Design Series, creado como un "lujoso espacio en el que viajar". Tapicería de cuero perforada de doble tono, detalles contrastados, volante con marca central también en color o costuras de lo más cuidades para los laterales de los asientos o los revestimientos de las puertas.
Las molduras decorativas de la consola lucen un acabado 'Piano Black', aunque también hay listones de fibra de carbono enriquecida con titanio, algo heredado del mundo de la aeronáutica que Bentley no había utilizado nunca antes (y, según la marca, tampoco ninguna otra marca). El precio no se ha hecho publico pero, en cualquier caso, con sólo 100 unidades, no será barato ni para los estándares de Bentley.
