En teoría, 300 conductores han perdido su carné de conducir desde la entrada en vigor del permiso por puntos. Sin embargo a nadie se le ha realizado la retirada efectiva del permiso. El motivo es que los recursos presentados por los conductores sancionados alargan el proceso.
Pere Navarro ha comparecido ante el Congreso para pedir un cambio en la normativa que permita que las sanciones sean “ágiles, rápidas e inmediatas”. Para ello buscan un modelo parecido al de Francia, dónde los conductores deben pagar primero y después recurrir la sanción si así lo quieren.
Por su parte, el Ayuntamiento de Madrid también quiere acabar con el gran número de multas que quedan sin ser pagadas, y quiere cobrarlas directamente a través de Hacienda, tal como hacen ya la Guardia Civil y algunos ayuntamientos como el de Barcelona.
Vía | Terra Motor
