La última creación de Škoda, basada en el compacto Škoda Spaceback, cambia la línea del modelo original para convertirse en el Škoda Atero Coupé. Lo mejor de todo es que este Spaceback con sabor a Focus RS de anterior generación, al menos a nivel estético, es obra de 26 estudiantes a los que se les brindó la oportunidad de demostrar su talento en el mundo de la automoción.
Estos aprendices han necesitado unas 1.700 horas de trabajo para convertir el Spaceback en un coupé, retrasando el pilar B y cambiando la forma del pilar C, con una línea de techo más inclinada hacia la zaga y sólo dos puertas. A esto hay que sumar faros LED, capó rediseñado con varias tomas de aire y elementos contrastados de color rojo en parrilla, retrovisores, taloneras, etc...
También cambian los paragolpes, y se nota especialmente en el trasero, puesto que aloja las salidas de escape duales, tomadas del Octavia RS. A pesar de todos los indicios que harían pensar que bajo el capó se esconde "algo gordo", lo cierto es que equipa un motor 1.4 turbo de 125 CV junto a una caja de cambios DSG de siete velocidades.
A las llantas de aleación de 18 pulgadas en diseño Turini, heredadas también del Octavia RS, se añade luz ambiental LED en el interior, detalles en color rojo a juego con el exterior y un equipo de música de 14 altavoces con una potencia de 1.400 vatios y un poderoso subwoofer de 400 varios en el maletero. Eso sí, el Atero Coupé no pasará de lo que es, un one-off.
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