Hace unos meses vimos los renders del Rinspeed sQuba Concept y bueno, parecía extraño (por no decir otra cosa) ver a un coche haciendo las veces de submarino, aunque esa escena ya la hemos vivido con el Lotus Esprit de James Bond en La Espía que me amó.
Más de treinta años han pasado desde que se estrenó la película y desde entonces Frank M. Rinderknecht, propietario de Rinspeed, ha estado dándole vueltas al asunto: ¿cómo podría conseguir hacer que ese concepto fuese realidad?
Tras muchas investigaciones, por fin ha llegado el turno de mostrar a todo el mundo su obra, el Rinspeed sQuba Concept y el lugar elegido es nada menos que el salón de Ginebra.
Propulsado por motores eléctricos, garantiza que sus emisiones son igual a cero, siendo además de un curioso invento para disfrutar de la naturaleza submarina, un coche ideal para conservarla. Mientras que para circular por carretera sólo utiliza uno de ellos, bajo el agua usa otros dos, que alimentan unas hélices situadas en bajo el paragolpes trasero.
Una vez bajo el agua, con la ayuda de unos alerones situados tras el habítaculo y unos jets que sobresalen de las aletas delanteras, puede moverse como pez en el agua (nunca mejor dicho) hasta una profundidad máxima de 10 metros.
Muchos se preguntarán porque se han decidido por un descapotable si se va a sumergir. Pues la respuesta es sencilla (y lógica): la seguridad. Haciéndolo así, en caso de emergencia, los ocupantes podrían abandonar el coche mientras está sumergido en un momento, mientras que con el habitáculo cerrado, abrir una puerta se haría bastante difícil, teniendo en cuenta las fuertes presiones que pueden llegar a soportarse a 10 metros de profundidad.
Una vez abandonado el coche, sin el peso de sus ocupantes saldría a flote por sí solo. Parece que lo tienen todo pensado, y bien pensado. Y yo añado otra cosa de cosecha propia. En caso de tener este coche para el disfrute del mundo submarino, poco te importará mojarte un poco si vas bien equipado con tu traje de neopreno.
Incluye también otras tecnologías, como la capacidad de conducción autónoma en carretera, gracias a un avanzado sistema de láser que guía el coche por el camino correcto. Por cierto, para aumentar su amistad con el Medio Ambiente, incluso los lubricantes usados en sus diferentes partes motrices son biodegradables, así que no hay problema alguno si tenemos alguna fuga y dejamos alguna mancha en el agua.
Habrá que verlo en movimiento, porque las imágenes prometen y mucho.
Fuente | Rinspeed
Datos técnicos | Rinspeed sQuba Concept Technical Data
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