Este fin de semana me enteré de una aplicación nueva de los paneles solares, recargar baterías de coche. Quien se ha dejado un coche aparcado mucho tiempo ya sabrá lo que es quedarse tirado por descarga. Por causas naturales toda batería se va descargando y llega a agotarse si no se recarga.
Quien tiene el coche frecuentemente al sol puede utilizar un recargador de baterías solar. Tienen dos funciones principales. Por un lado mantienen la carga de la batería, así que el coche puede estar aparcado “indefinidamente” sin que la carga de la batería disminuya, podría arrancar sin problemas (en ese aspecto).
La otra finalidad es la de recargar una batería que se ha agotado, sin necesidad de pinzas y otro coche. Solo servirá si la batería no está completamente muerta, caso en el que no cargará nada. Antes de seguir adelante, hay que hacer un pequerepaso de física, concretamente electricidad.
La intensidad de corriente se mide en amperios. El voltaje se mide en voltios, las baterías de coche convencional son de 12 V. Ojo, que aquí no hablo para nada de híbridos o eléctricos, sino de las baterías de toda la vida. Una batería común tiene 12 voltios y 40 amperios/hora.
Un cargador solar pequeñito como este, proporciona 0,17 amperios a un voltaje de 15,5 voltios. Es decir 0,17 A * 15,5 V = 2,6 W. Es capaz de recargar la batería en cuestión de horas a través del conector del mechero/tomas 12 V, o directamente a los bornes de la batería mediante unas pinzas.
Su uso hace que la batería dure más tiempo y supondría un pequeño ahorro económico. También suponen un ahorro en combustible, al estar la batería más cargada, el alternador trabaja menos, luego lastra menos el motor y eso se traduce en menos consumo. Recordad que el 100% de la electricidad de un coche no-híbrido viene del combustible.
Ahora bien, ¿ese ahorro merece la pena? Unas luces LED para coche, que es de lo que menos gasta, consumen menos de 1 W. Según el fabricante se ahorran, a lo largo de su vida útil (más de 10 años), hasta 500 dólares en baterías y recargas de la misma. El cacharro en cuestión cuesta casi 40 dólares.
Se ahorran unas emisiones de dióxido de carbono de unos 3,85 kg al año según su fabricante. Un coche que gasta 8 l/100 km y hace 10.000 km al año emite 2.240 kg de este gas. Si con ese consumo, en un año el motor se traga 800 litros, nos ahorramos en gasolina 1,25 litros. Si es gasóleo, ahorramos 1,094 litros.
Vale, si el panel solar es pequeño, pongamos uno más grande, por ejemplo en la bandeja del maletero, para no perder funcionalidad ni visibilidad. Generará más electricidad, pero el coste de los paneles hará inútil cualquier ahorro en ese sentido.
El Citroën C3 Picasso e-HDi tiene placas solares en el techo suficientes para aliviar un pelín de esfuerzo al alternador de su motor convencional (tampoco es híbrido), y eso permite ahorrar algo de gasóleo, la marca no ha indicado cuánto. Nótese el tamaño de los paneles solares, casi todo el techo.
Me gustaría que los que más entienden de electricidad por aquí hiciesen un cálculo de cuánto panel solar necesitaríamos para aliviar el consumo de un turismo en 0,1 l/100 km (gasolina o diesel). Me siento incapaz de hacer semejante cálculo sin equivocarme en el planteamiento, y dejé la física aparcada en 2005.
En cuanto a los coches híbridos, un panel solar que cubre casi todo el techo supone un ahorro en combustible tangible, pero a partir del tercer año más o menos, mientras tanto el sobrecoste del panel no se habrá rentabilizado. Los coches a la venta pueden tener paneles solares pero solo para climatización.
Por ejemplo, el SEAT Exeo, Audi A4 o Toyota Prius pueden tener un techo solar que es capaz de bajar algunos grados la temperatura del habitáculo con la ventilación forzada si el coche está parado al sol, pero no es suficiente para el aire acondicionado. Su impacto en el consumo es cero, no hay conexión con la batería (normal o híbrida), no recargan nada.
Lamentablemente la energía solar no sirve para automoción a menos que hablemos de prototipos hechos para carreras de miniconsumos, desprovistos de cualquier lujo, dimensiones de neumático ridículas, una velocidad muy discreta, habitáculo tipo bala, etcétera.
Pero bueno, a día de hoy se puede evitar que una batería de descargue y que haya que evitar pasear el coche “porque sí” para mantener la carga y el gasto en combustible que eso implica. Además, la batería tendrá una vida útil superior. Eso es menos que nada, ¿verdad?
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