Menudo espectáculo que han dado los campeonisimos en este acto publicitario organizado por Red Bull. En una especie de grito de protesta con el que decir que esta semana no va a ser solo Fórmula 1. Los austriacos nos enseñaron como juntando un WRC, una motoX, dos granes pilotos y una superficie deslizante, en este caso adoquines con una capa de barro, puede ser sinónimo de espectáculo.
Y la verdad ninguno defraudo haciéndonos olvidar que sobre esa carretera la semana pasada se había disputado la famosa carrera ciclista denominada Tour de Flandes. El propio Loeb cambio el mono de maquina fría y calculadora por otro con más ganas de dar espectáculo y de divertir a la gente allí presente. Sin duda el trompo del piloto de Citroën en un palmo de carretera es de lo más espectacular que he visto en mucho tiempo. Tampoco hay que desmerecer la actuación de Everts, que si bien partía con cierta ventaja al ser un terreno mas estrecho y favorable para su KTM que para el C4 WRC. El diez veces campeón Mundial de motoX declaró sentirse feliz al ser el primero en vencer a Séabstien Loeb en lo que llevamos de 2009. Por supuesto el piloto de Rallyes no se libró de lavar la moto de su oponente tras la carrera.
