El francés ha tenido desde luego lo que se llama un mes redondo. En el rally de Japón conseguía romper todos los records haciéndose con su quinto entorchado mundial consecutivo en tan solo seis años. Poco después conseguía el octavo puesto en los test invernales de Fórmula 1 por encima de pilotos mucho más experimentados a los mandos de un monoplaza.
Hace dos días probaba uno de los impresionantes Peugeot 908 Hdi que corrieron en las 24 Horas de Le Mans y de nuevo volvió a sorprender con su buen manejo al volante de la barqueta francesa. En tan solo 5 vueltas el alsaciano ya se encontraba a menos de medio segundo del mejor tiempo de Stephane Sarrazin que posteriormente demostraba también sus manos a los mandos del Citroën C4 WRC en una pista de tierra cercana al circuito de Castellet. El pentacampeón del WRC declaraba a los medios que le había sorprendido la reducida visibilidad que permitía el cockpit. Además añadió que saboreó cada minuto de esta nueva experiencia pero que en ningún momento llegó a coger la suficiente confianza con un coche demasiado sobrevirador como para atacar a fondo.
Video de los test de Loeb:
