El 2009 la Formula 1 va a vivir uno de las mayores revoluciones de los últimos tiempos. Los monoplazas dejan de ser naves espaciales para convertirse en máquinas toscas, al menos estéticamente, con el fin, a priori, de permitir adelantamientos. Un año en que los cambios técnicos podrían considerarse de drásticos, pero que contrasta mucho con el casi nulo movimiento en los asientos.
Sólo la retirada de David Coulthard permitió dejar una vacante en la parrilla. El movimiento arrastró a Sebastien Vettel a Red Bull dejó un asiento vacante en Toro Rosso, convirtiendo a Sebastien Buemi en el único nuevo piloto de la parrilla. Ni siquiera la confirmación de Sebastien Bourdais (bien por el francés) como segundo piloto de la escudería italiana hubiera sido una esperanza de ver alguna cara nueva ya que para ese segundo asiento sonaban nombres ya conocidos.
Antes de la desaparición de Honda, para el asiento de Rubens Barrichello (¿ hora de una jubilación anticipada?) ya sonaban unos cuantos nombres. Savia nueva para un equipo necesitado de ella, pensábamos algunos. Pero la retirada fulminante de Honda pronto nos negó tal oportunidad. Menos equipos significa menos oportunidades para los jóvenes valores. En el pasado la escuderías modestas permitían la entrada de nuevos pilotos por obra y gracia del vil metal de sus patrocinadores pero en estos momentos, ni siquiera Force India se permite el lujo de sacrificar experiencia por dinero.
2009 será un año continuista en cuanto a nombres. A pesar de que cada vez se cuenta con más fórmulas de promoción y más estrellas en ciernes, las escuderías no se atreven a dar el paso. Sirva de ejemplo que por primera vez el campeón de la GP2 no consigue un asiente en la categoría reina. Aunque el hecho de que Alvaro Parente Giorgio Pantano no sea un "joven" valor pueda haber tenido su valor extra.
Además durante esta temporada, la reducción en los tests reducirá casí a anecdótica la participación de los pilotos de pruebas de las escuderías. Menos oportunidades de ponerse al volante y de demostrar que se merecen un sitio. Ahora sólo tenemos que esperar a que algún patrón se canse de los malos resultados para que se anime a dar el paso. Nelsinho Piquet, Kazuki Nakajima son nombres que a nadie se le escapan. Hagan sus apuestas.