No os asustéis, no es un nuevo plan de Jean Todt para ayudar a Kimi Raikkonen en su lucha por el título de pilotos. Según informa la página oficial de la Race of Champions (Roc), ese evento que cada final de temporada reúne a gran cantidad de buenos pilotos en busca de la corona de Campeón de Campeones, Michael Schumacher volverá a pilotar pero esta vez por una buena causa. El apoyo que destina esta competición-exhibición al Instituto para el estudio de los desordenes medulares y cerebrales, del cual Schumacher es uno de sus fundadores, es la buena causa que nos permitirá disfrutar del alemán de nuevo en la pista. En 2004 el alemán ya disputó esta prueba batiendo a Sebastian Loeb en semifinales y perdiendo ante un jovencísimo Heikki Kovalainen en la final.
La RoC nació en 1988 con un premisa muy simple. Los pilotos utilizarán el mismo vehículo en un mismo trazado para que la diferencia la marque el talento de cada uno. El play-off comienza con una batalla del K.O entre los pilotos que compiten en la misma clase de competición. Una vez definido el campeón de clase, estos se enfrentan entre si para determinar quien es el mejor. Tras pasar por diversas localizaciones, el próximo 1 de diciembre la prueba se disputará en el remozado estadio londinense de Wembley. Entre la nómina de confirmados para este año, tenemos al ya citado Michael Schumacher; al piloto de Honda, Jenson Button; al actual campeón del mundo de WTCC y actual líder Andy Priaulx; al piloto de Red Bull Racing, David Coulthard; al tres veces, camino de cuatro, campeón de la Champ Car y piloto Toro Rosso 2008, Sébastien Bourdais; al siete veces vencedor en Le Mans, Tom Kristensen; al dos veces campeón del mundo, quizás por diciembre 3, Marcus Grönholm; al actual campeón de la NASCAR, Jimmie Johnson; al 8 veces campeón de los X-Games, Travis Pastrana; y al piloto de la DTM y vigente campeón de esta prueba, Mattias Ekström. Entre las bajas más destacadas, la del antiguo campeón del mundo de Rallyes, el recientemente fallecido Colin McRae.
Recordemos que el años pasado la prueba se celebró en el Stade de France en Paris y tuvo como finalistas a Sebastian Loeb y a Mattias Ekström que a los mandos de un Megane de la Supercup y un Xsara WRC lucharon por la victoria. Aunque suene extraño, Ekström consiguió la victoria con ambos vehículos, batiendo a Loeb con su propio Citröen Xsara WRC y es que a este sueco también le podemos ver en la lista de inscritos de algún que otro rallye del mundial a los mandos de un Skoda Fabia WRC. Una buena cita para disfrutar del espectáculo de estos fantásticos pilotos.
Vía | RoC